Casi tres años lleva Anita Matamoros viviendo en su actual hogar. Un espectacular dúplex con terraza situado en uno de los mejores barrios de Madrid que poco a poco va haciendo suyo y poniendo a su gusto. La hija de Kiko Matamoroso y Makoke ha elegido con mimo cada detalle de su casa y se ha tomado su tiempo. Tras mucho tiempo diseñando cada espacio y buscando los muebles que mejor se adaptan a sus necesidades y gustos, el salón, que ha decorado con la ayuda de su novio, el cantante Jhonny Garso, ya se ha convertido en su lugar favorito de la casa.

Aunque reconoce que aún le quedan algunos pequeños detalles, por fin siente que está perfecto. "Me siento más en casa que nunca", ha dicho Anita Matamoros sobre este amplio y luminoso salón con varias zonas bien diferenciadas que se ha convertido en el lugar perfecto para reunirse con amigos y disfrutar.

La primera zona que encontramos en el salón es una especie de recibidor con una cómoda de dos puertas de madera de fresno maciza con gran almacenaje. Sobre este mueble encontramos varios elementos decorativos entre los que destaca, además de dos ramos de flores secas, un cuadro de su novio. "No solo canta, también pinta", ha dicho orgullosa sobre esta pintura en la que predominan el rojo y el negro. Y junto a este recibidor una lámpara de pie de diseño con formas curvas y abstractas en tonos blancos.

De esta zona se pasa directamente a la zona de comedor en la que Anita ha contado nuevamente con la ayuda de su novio para darle un toque muy personal. Según ha contado la creadora de contenido, tras algún tiempo con una mesa muy grande y tras buscar sin éxito la mesa ideal para este espacio, su pareja dio con la clave y juntos crearon una pieza única. La pareja reconvirtió en mesa un espejo de fibra de madera prensada decorado en cuadrados blancos y negros que crean un efecto muy original que antes estaba colgado en algún rincón de la casa. El resultado es espectacular aunque Anita reconoce que la mesa no resulta muy práctica. "Es bastante delicada y no es muy funcional pero, ¡cómo queda de bonita! Al final eso es lo más importante", ha señalado la creadora de contenido. Para completar el conjunto, se ha decantado por unas sillas que tienen más de quince años en piel blanca con una pata central metálica.

Junto a la mesa una gran estantería en color madera reciclada de su dormitorio en la que ha colocado, además de una pequeña biblioteca, varios elementos decorativos como los vinilos de su novio, una lámpara, un candelabro, sus cámaras o algunas copas de colores que además de ser funcionales aportan un toque muy especial a la estantería.

Gran amante de la música y con un novio cantante no podía faltar un espacio dedicado a ella. Este rincón, situado junto al gran ventanal que aporta luminosidad a la estancia, encontramos un tocadiscos sobre un pequeño mueble de diseño y un espejo espejo. Además, la guitarra Gibson Les Paul de su novio y otra guitarra eléctrica en color rosa colgada en la pared. Una pieza que estaba en casa de Jhonny Garso, con quien ella ha asegurado estar deseando casarse, pero que le pidió para poder completar este lugar tan especial. "Le dije que la necesitaba porque es rosa", bromea Anita, que ha explicado que "todos los toques del salón son rosas". Por último, esta zona se encuentra un sofá blanco donde poder disfrutar de la buena música y una planta.

La parte más acogedora de la casa según Anita es la zona de relax y reunión con los amigos en la que se encuentra una televisión de gran tamaño y un aparador a juego con la cómoda del recibidor, pero en esta ocasión de menor altura y con cuatro puertas. Junto a este aparador la guitarra acústica de la hija de Kiko Matamoros y Makoke, que está aprendiendo a tocar. Sobre la televisión otro detalle único: una fotografía enmarcada que fue realizada por Pedro Almodóvar que ganó en una rifa benéfica organizada por la revista 'Elle'.

Por supuesto no faltan los elementos decorativos como libros de mesa, una lámpara de color naranja, un candelabro, un cuadro de Holguín que compró en un estudio de tatuaje o un mueble multiusos que utiliza para sentarse, como banco de gym o para dejar cosas. Además, presidiendo el salón, una serigrafía de la Pantera Rosa de Miguel Caravaca que está colgada sobre el enorme sofá al que ha tenido que quitar un módulo porque al comprarlo se equivocó de medidas y resultaba demasiado grande. El sofá, que es de color claro y en el que ha colocado varios cojines y mantas, da a una amplia terraza.

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