Si quieres darle un aire renovado a tu hogar, la mejor manera de empezar es por el salón. En las tendencias más actuales, los salones modernos presentan un estilo atemporal, con mucha personalidad y el toque de calidez que toda casa necesita. Muebles confortables, diseños originales, materiales naturales y funcionalidad se unen para conseguir el salón de tus sueños. Compruébalo con estas ideas que te servirán de inspiración. 

La tendencia de unir el salón con la cocina cobra fuerza en las casas más modernas. Las dos estancias en las que más tiempo pasamos se fusionan para resultar útiles y jugar con la decoración. Para darle entidad propia al salón, nada como una alfombra y añadir textiles sin miedo, como las mantas de sofá. 

Sabemos que un buen sofá es imprescindible, pero aprovechar otros espacios, como el que hay debajo de las ventanas, para un banco de obra es una idea sensacional. Hazlo confortable con pequeños colchones y cojines y conseguirás un espacio único, moderno y funcional. 

Volvemos al indiscutible protagonismo del sofá, que puede potenciarse hasta conseguir que forme una U alrededor de una pequeña mesa de centro. Esta disposición es toda una declaración de intenciones acerca de la vida que tiene una casa, donde la comodidad y la posibilidad de reunir a mucha gente tienen la misma importancia.

Los muebles de este salón son definitivamente modernos, de líneas sencillas, pero rotundas. Para introducir elementos oscuros, como la butaca o los textiles, se utiliza un color claro de base, como el del sofá o la alfombra. La iluminación de la estantería aporta calidez y el resultado es muy sofisticado. 

Un salón con pocos elementos decorativos y en tonos claros no tiene porqué resultar frío, ni mucho menos. La estantería de obra da el toque artesanal, y la forma redondeada del sofá, tan moderno como cómodo, resulta muy cálida. No pases por alto el detalle de las plantas, que equilibra el conjunto. 

Para que un salón sea moderno no hay que renunciar a muebles clásicos que se pueden integrar a la perfección en el conjunto. Una mezcla equilibrada, que huya de la saturación, es clave para lograr la armonía. Como ves aquí, se utilizada el tapizado del sofá en color claro para contrarrestar que los muebles más antiguos sean oscuros. 

Cuando no tenemos claro cómo podemos arriesgar con el color, el blanco consigue adueñarse de las paredes del salón. Los interioristas animan a perder ese miedo y apostar por tonalidades como el verde, que llenan de vida cualquier estancia. Si todas las paredes te parece excesivo, elige una pared de acento, que es máxima tendencia.

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