Una cocina pequeña puede ser moderna, bonita y muy bien aprovechada. Es una estancia tan importante como cualquier otra, en la que se pasa mucho tiempo y se merece toda nuestra atención a la hora de decorarla. Estas ideas te servirán para sacarle el máximo partido a la tuya y hacerlo con estilazo. El color de los muebles, islas mínimas pero muy útiles y paredes con personalidad son algunas de las sugerencias que no te puedes perder. 

Nos hemos enamorado de esta cocina pequeña que, además de estar bien aprovechada, ha apostado por una decoración especial para la mesa de comedor del rincón, con elementos más propios de un salón de que de una cocina, como la lámpara o el espejo. 

Esta cocina está en un espacio de paso, pero no invade más de la cuenta. Los muebles de madera y el color blanco de la pared son ideales para integrarse a la perfección con el resto de la casa, pero sin perder su propia esencia. 

Cuando el espacio es pequeño, el color blanco es infalible (que no imprescindible) para dar sensación de amplitud. Si no quieres que el resultado puede parecer aburrido, introduce elementos en negro para crear contraste.

Cuando el salón y la cocina comparten espacio, una isla es la solución ideal para delimitarlos sin perder la sensación de apertura. Además, la isla es útil para comer en ella, cocinar y como espacio de almacenaje.

Si no estuviéramos viendo la barra al final de la cocina, no se nos habría ocurrido ponerla. Pero ahora nos parece un gran acierto por lo práctica que es para comer en ella (ocupa menos que una mesa) y por el toque moderno que le da a la estancia.

Si la casa es pequeña en general, puedes aprovechar una parte de la cocina como zona de comedor. El banco integrado en la pared es útil, bonito y cálido, perfecto para sentarse. Fíjate también del juego de colores de los asientos, ideales cuando la mesa es blanca. 

Evitar los muebles en la pared es siempre una buena idea para que el espacio se vea más amplio. Si te lo puedes permitir, aprovecha esa parte para decorarla con personalidad. Y toma nota de los ganchos por toda la pared, ideales para colgar utensilios de cocina o paños. 

Si tienes que aprovechar cada rincón de tu cocina para poner muebles, es conveniente que estos sean sin tiradores. Y en este caso el blanco es el color más acertado para dar amplitud. 

Si te gusta la estética vintage y con un toque rústico, introduce pequeños detalles como muebles de madera o un asiento con cojines. Aunque la cocina sea pequeña no tienen por qué renunciar a ese estilo que tanto te gusta.

Combinar colores también es posible en cocinas pequeñas. Intenta que el oscuro vaya en la pared y el más claro en los muebles, para dar sensación de amplitud y profundidad.

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