María Pombo y Pablo Castellano han comenzado la mudanza de su nueva casa. La pareja, que lleva cuatro años viviendo de alquiler en un piso del centro de Madrid, ha abandonado el que ha sido su primer hogar para comenzar los preparativos y poder trasladarse a la casa que llevan meses construyendo. Lo cierto es que no todo ha sido un camino de rosas desde que tuvieron la idea de comprarse una casa juntos y, aunque el sueño parece estar cada vez más cerca, un nuevo imprevisto ha impedido que puedan instalarse en su nueva casa.

Su primer paso fue comprarse un piso en una urbanización de Aravaca, pero los problemas burocráticos retrasaron los planes y la pareja tomó otra decisión. Hace unos meses, María Pombo anunciaba en su cuenta de Instagram que habían comprado una nueva casa que han decidido reformar. Grupo Archarray, la empresa que Pablo Castellano dirige junto a uno de sus hermanos, ha sido la encargada de convertir esa casita baja en el hogar de la pareja.

Tras darse el ‘sí, quiero’ hace un año, la pareja comenzó con el diseño y las obras de la casa para poder mudarse lo antes posible, pero la crisis sanitaria que ha provocado el coronavirus ha mantenido la reforma parada durante unos meses. Finalmente, este lunes la pareja guardaba en cajas todos sus recuerdos y los trasladaban a su nuevo hogar que se encuentra cerca de Arturo Soria, también el centro de la capital.

“Estoy muy ilusionada, pero también tengo un nudo en la garganta porque me da mucha pena dejar esta casa”, contaba la influencer mientras organizaba las cajas para la mudanza. “Llevamos cuatro años viviendo aquí, ha sido nuestra primera casa y tenemos muchos momentos buenos”, explicaba a sus seguidores.

Una vez en la nueva casa y mientras colocaba las cajas de la mudanza, la influencer explicaba que no van a poder trasladarse a vivir allí por el momento. “Todavía no vamos a venir a dormir a esta casa, faltan cosas importantes. Nos vamos a ir una semana o diez días a dormir a casa de mis padres”, contaba. La pareja va a aprovechar a hacer la mudanza durante estos días y, de esta forma, dar margen a que lleguen los muebles, ya que se ha visto todo retrasado por la crisis sanitaria que ha provocado el coronavirus. “Creo que todo estará para finales de junio. Va a ser un proceso lento pero emocionante”, aseguraba la pequeña de las Pombo.

La mudanza a su nuevo hogar se va a dar en mitad de la preocupación de la influencer por su salud. Hace tan solo unos días, María Pombo contaba a sus seguidores que está a la espera de un diagnóstico definitivo que determine si padece o no esclerosis múltiple. Tras sufrir un “extraño hormigueo” en las piernas, la mujer de Pablo Castellano acudió al hospital, donde se dieron cuenta de que padece mieleitis, una inflamación en la médula. Por el momento, la influencer se encuentra “muy positiva” con esto y esperando conocer los resultados.