Durante muchos años, Angelina Jolie y Brad Pitt fueron la pareja del momento. Comenzaron su relación en medio de una gran polémica, tras enamorarse en el rodaje de Sr. y Sra. Smith y una vez que Brad se divorció de quien era su mujer en esa época, Jennifer Aniston. 

Durante mucho tiempo fueron inseparables y juntos formaron una numerosa familia. No fue complicado, Angelina ya aportaba tres hijos al matrimonio, Maddox, Pax y Zahara, que Brad no dudó en adoptar, pero además decidieron ampliarla con la llegada de Shiloh y el posterior nacimiento de los mellizos Vivienne y Knox. 

Los Jolie Pitt parecían una familia feliz, pero en 2016 la pareja anunciaba su separación, tras más de diez años de relación y dos años después de haberse casado en una íntima ceremonia. Comenzaba así una dura batalla entre los intérpretes en los tribunales, por la custodia de los pequeños y también por demostrar que las cosas en su matrimonio no eran como todo el mundo pensaba. 

Una batalla que parece que está cercana a su final, según afirman desde la revista OK!, donde aseguran que Brad quiere comprar a Jolie su parte de Miraval, su paraíso vinícola en Francia, pero también reparar la relación con sus hijos, tras el caos que ha supuesto en sus vidas la separación y divorcio. 

Según informa el medio, el actor tendría buena relación con los cinco pequeños, no así con Maddox. Los más pequeños de la casa ya no lo son tanto, de hecho los mellizos, que nacieron en 2008, han cumplido 15 años el 12 de julio. 

Desde el divorcio de sus padres, los hijos de la pareja se han volcado en apoyar a su madre. Han pasado de llevar una vida al margen de los focos, a dar un paso al frente en algunas ocasiones, como durante algunos estrenos de películas protagonizas por Angelina, donde no han dudado en posar junto a ella. 

Así sucedió en el estreno de Maléfica, donde además aparecía una pequeña Vivienne interpretando a una joven Aurora, al parecer era la única niña de todas las que vieron que no se asustaba de Jolie y su maquillaje de ‘villana’. También acudieron juntos al estreno de Eternals. 

Los seis han estado muy pendientes de su madre y esto es lo que han recogido las cámaras, pero al parecer durante todo este tiempo, también han tenido relación con su padre, algo que no se ha podido ver. Estos años de batalla legal han sido complicados para todos ellos, que han tenido que lidiar con ello mientras sus vidas seguían adelante. 

Poco a poco, los mayores han ido escogiendo sus caminos, Maddox estaba estudiando en Seúl cuando comenzó la pandemia y regresó a casa, y ha trabajado como productor, compartiendo proyecto con Pax en Se lo llevaron: recuerdos de una niña de Camboya; Zahara estudia en Spelman, en Atlanta, y Shiloh pronto acabará el instituto y tendrá que decidir qué le apetece hacer. 

Vivienne y Knox habían sido los pequeños de la casa, pero ahora ya son dos adolescentes que han pegado un buen estirón, están casi tan altos como su madre, y que se comienzan a despedir de los rasgos infantiles para acercarse hacia una nueva etapa. Continúan manteniendo un gran parecido a sus padres, pero cada vez con mayor personalidad propia.