Eduardo Rosa no es de los que nació queriendo ser actor. Desde que tuvo "uso de razón" hasta que cumplió 17 años quiso ser futbolista, pero un ejercicio de expresión corporal en el colegio le hizo cambiar de opinión. "Cuando salí yo se dejaron de reír y se pusieron tensos. Entonces, dije: ‘¿Y esto? Me encantó y a partir de ese momento hablé con el entrenador, dejé el fútbol y se lo conté a mis padres", contó hace unos años en 'La voz de Galicia'. Ellos, sus padres, "fliparon", según sus propias palabras, porque siempre quisieron que estudiase "una carrera normal". "Piensan que ser actor es dificilísimo, que va por contactos y que tú no tienes ninguno", explicaba el sevillano.

Motivado por la opinión de sus padres y porque veía que los actores "malvivían", Eduardo decidió probar suerte y empezar a estudiar Turismo, pero al final su vocación terminó saliendo a la luz. Por eso, en el año 2015 se formó en el estudio Juan Codina, en Madrid, y empezó a hacer alguna aparición en series como 'Centro médico'. En el año 2018 consiguió su primer papel importante en 'Presunto culpable', donde trabajó con Miguel Ángel Muñoz.

Para él esa oportunidad fue "el gran paso" en su carrera como actor. Hasta entonces había hecho prácticas en un hotel y había trabajado de camarero para "mantenerse", pero aquel papel le permitió dedicarse "de lunes a viernes" a lo que le "apasionaba".

De pequeño vio muchas veces 'El Zorro' y el papel de Antonio Banderas le ayudó a decidirse. "Cada vez que he tenido el más mínimo sentimiento de derrota, me ponía una charla que él dio en la que relata su historia. Mi mayor sueño sería hacer la tercera de El Zorro", asegura en la entrevista que concedió al medio citado anteriormente.

En cuanto a sus proyectos profesionales, fue en 2019 cuando consiguió una proyección internacional con Netflix, en la segunda temporada de 'La casa de las flores'. Pararlelo a eso, logró un papel en la adaptación de la trilogía del Baztán; en las películas Legado de huesos (2019) y Ofrenda a la tormenta, de Fernando González Molina. En el año 2021 protagonizó 'Poliamor para principiantes', una comedia de Fernando Colomo en la que trabajó junto a María Pedraza. Más tarde protagonizó también 'El regreso de la espía (In from the Cold)', otra serie de Netflix en la que se mete en la piel de un mercenario que anteriormente fue militar.