María Castro desvela cómo ha conseguido que su hija Olivia, de tres años, deje la lactancia materna

María Castro acaba de vivir uno de los momentos más difíciles junto a su hija Olivia, de tres años. La actriz, que recientemente ha anunciado su tercer embarazo, reconoció hace unos meses que la menor de sus hijas (hasta el momento) seguía tomando lactancia materna. Fue el pasado mes de agosto cuando la protagonista de 'Sin tetas no hay paraíso' habló públicamente sobre su experiencia y lo complicado que le resultaba tanto a ella como a su hija dejar atrás este hábito.

Sin embargo, parece que esta etapa junto a Olivia ha llegado a su fin, tal y como ha explicado en redes sociales. Entre lágrimas, la actriz ha redactado una reflexión que parecía que nunca iba a llegar y que supone un antes y un después en su vida y en la de su hija.

El fin de una etapa para María Castro

"Fin de una etapa… Esta es mi primera 'teti' (refiriéndose a la primera vez que amamantó a su hija pequeña) con Oli. Esta foto de ayer y fue tomada después de la última, creo… Después de tres años, puedo confesar que lloré… Pero un rato largo y en silencio, mientras le agarraba fuertemente la manita. Quizá a algunos les parezca exagerado, pero hace mucho que decidí no juzgar los sentimientos (...) ni juzgar tampoco los míos", ha comenzado relatando.

Tras varios años de lanctancia materna, (algo que nunca se le pasó por la cabeza antes de ser madre) la actriz ha hecho un balance sobre su experiencia personal. "Nunca pensé que estaría tres años dando de mamar a nadie… Pero es que tampoco nunca pensé que ninguna de mis hijas querría seguir ahí, de algún modo “enganchada” a mi, 3 años después. Con Maia fue un destete sencillo, a los 8 meses, y casi sin estar yo preparada, un día cerró la boca… Y ya nunca más. Con Oli… Con Oli fue bien distinto. Soportamos crisis de lactancia; la salida de los dientes; algún que otro mordisco y una gira enorme de por medio, sacándome leche por España entera…", ha continuado explicando.

Aunque ha sido ella la que ha dado de amamantar a sus hijas, la actriz ha aprovechado la ocasión para mandar un emotivo mensaje a su marido, un apoyo fundamental durante los últimos años: "En este punto, tengo que darle las gracias a mi marido por entender que la lactancia es cosa de dos. Gracias papá… Sé que te acostabas con terror y seguro que con lágrimas de impotencia más de una vez".

La tierna conversación de la actriz con su hija

Tras hacer un breve resumen sobre su experiencia como lactante, Castro ha comunicado a sus seguidores el fin de una etapa, que supone el comienzo de otra muy emocionante (y diferente) para ella. "Hace tres meses que estoy embarazada y aún con mis dolores y malestar he elegido seguir (refiriéndose a la lactancia materna), para ver si era ella (su hija Olivia) la que tomaba la decisión… Sobre todo porque, mamando solo para dormir, me olía que el final podía estar cerca…", ha relatado.

Pero, ¿cuál ha sido el punto de inflexión para que la actriz tome esta decisión? Castro ha confesado que hace unos días no pudo evitar escuchar una conversación entre sus hijas. Concretamente Maia, la mayor, le preguntó a su hermana Olivia cuándo iba a dejar de tomar el pecho. Una pregunta que hizo saltar las alarmas de la pequeña que respondió tajante que, "cuando nazca su próximo hermano o hermana".

Una charla entre hermanas que hizo que la actriz diera un paso adelante y que aprovechó para hablar con su hija pequeña. Además, también recordó a una amiga que le dijo que en la semana 14 de embarazo había una bajada de producción de leche: "El caso es que algo se le debió quedar por ahí (a Olivia), que empezó a mamar aún menos de lo habitual. Las veces que se ha acercado a mi ya me ha sabido comunicar eso de “no sale mami”. Tras siete noches sin mamar, la de ayer, se acordó. Traté de disuadirla con cuentos, caricias… Pero ella insistía erre que erre… y entonces le dije: “Oli, la teta de mami está cansada, y apenas sale lechita ya… pero te apetece comprobarlo?".

Una propuesta por parte de la actriz que su hija aceptó: "Así que probó una… Probó la otra… Y volvió a decir… “no sale mamá”. Entonces yo la abracé muy fuerte, le di la manita y le pregunté… (necesitaba saberlo): “Oli, ¿estás triste porque no haya? ¿O no te importa?” Y por suerte me contestó: “no me importa mami”.

Una conversación de lo más entrañable madre e hija que María no ha dudado en compartir, así como sus sentimientos tras este episodio: "Seguí llorando, pero apartando el agobio y dejando paso al alivio y la nostalgia y le juré que siempre nos acordaríamos las dos de la 'teti' que tanto nos dio. Lo que cuesta a veces cerrar una etapa", ha concluído.