Sonó su nombre y Tilda Swinton subió las escaleras para recoger un premio que, para ella, "significa mucho". "Es un día muy especial para mí porque mi padre ha muerto esta mañana", dijo muy emocionada. "He estado con él la última semana. Él dormía, soñaba y yo estaba allí sentada pensando que qué estaría pensando". Por la cercanía de su cita con Sitges, la intérprete se planteó no acudir para acompañar a su padre. Pero su fallecimiento, parafraseando su discurso, llegó "justo a tiempo".
"Sabía que tenía esta preciosa invitación vuestra para venir aquí esta noche. Yo me preguntaba, ¿debería ir? Él se ha marchado esta mañana. He vuelto a preguntarme si debía venir a Sitges a aceptar este premio, y he pensado que sí, porque es por la fantasía", explicó, citando ese género que tanto ha marcado su labor en el cine. J.A. Bayona, admirador de Tilda Swinton y experto en el género fantástico, fue el encargado de entregarle el galardón.
John Swinton of Kimmergham, el padre de Tilda, murió horas antes de la inauguración del Festival de Sitges a los 93 años. Durante años trabajó como general mayor del ejército británico retirado, donde se dedicó a la Guardia de la Reina. En sus últimos tres años laborales fue oficial general al mando del distrito de Londres.