Hablamos con Sean Frutos (voz) y Fran Guirao (batería) sobre el nuevo disco, sus letras y lo que han aprendido en este último año en el que, según cuentan, "algunos miembros del grupo han pasado una época difícil". Pero eso ya pasó, ahora todo va hacia arriba. Se debe, en parte, al apoyo de sus seguidores, que se han implicado sobremanera en la financiación del disco. "Fue muy bonito y emocionante ver cómo el primer día ya conseguíamos el mínimo de la recaudación, que era una cantidad importante", dice Fran. Y también al trabajo y esfuerzo de tantos años, llevan juntos casi veinte y Sean nos cuenta que "después de tantas horas en la carretera ya nos lo hemos dicho todo".
Nuevo disco, 'Viaje Iniciático', ¿en qué os iniciáis a estas alturas?
Sean: Con cada disco proponemos un cambio, volver a empezar. Con este lo que queríamos, después de una etapa sacando discos de otra manera (con el apoyo de discográficas), era hacer un 'crowdfunding'. Es una forma de ofrecerle a la gente que nos lleva siguiendo tantos años un trato directo. Nos apetecía que se implicaran más. La verdad es que se volcaron desde el principio con el proyecto, como si fuera suyo y ha sido muy bonito. Para mí, además, este disco es una vuelta al sonido de los comienzos de Second pero con todo lo acumulado, lo aprendido en el camino. Es un aprendizaje plasmado.
¿Qué cosas habéis aprendido?
Sean: Hemos aprendido muchísimo a lo largo de estos años. Ya no somos tan inocentes. Tenemos letras más combativas, quizás los años nos van haciendo más ásperos y más duros en este sentido. Y al mismo tiempo seguimos teniendo ese punto sensible que no se pierde, pero con un toque diferente, no hemos querido perder la esencia.
Seguís teniendo letras muy personales, ¿qué las inspira?
Sean: Sí, todo te puede inspirar. Tanto lo que te pasa a ti como lo que ves. Algunas son autobiográficas y para otras te inspiras en cosas que ves. Algunos miembros del grupo hemos pasado una época difícil. Este último año ha sido una especie de prueba y eso está plasmado, tanto en la música (que es lo primero que hacemos), como en la letra (que la añadimos al final). Hay mucho de nosotros y de lo que vemos, estamos muy atentos a lo que pasa.
¿Lo habéis sacado todo en este disco?
Sean: Sí, la suerte que tengo (o que tenemos nosotros) es que con las canciones podemos hacer una especie de terapia. Lo sueltas todo y te quedas a gusto, en paz contigo mismo y con el universo.
Fran: Cuando haces un disco atraviesas una etapa en la que todo lo que llevas dentro, lo echas. Y luego pasas unos meses como un poquito… no vacío, pero todas las sensaciones y vivencias de esa época las has volcado en la música y las letras.
Sean: Dura poco, pero sí que es como verter todo lo que llevas en la cabeza y a flor de piel. Como dice Fran, te has vaciado y lo has dejado todo ahí. Luego pasan meses y vuelven a pasarte cosas.
Cuando subís al escenario, ¿volvéis a atravesar esas sensaciones y vivencias?
Sean: Pues sí. Hay canciones con las que me sigo emocionando como el primer día. Esa carga emocional que tienen la sientes cuando estás tocando, sobre todo si está sonando bien. Yo creo que todos nosotros a la hora de tocar sentimos lo que pusimos ahí y es como revivirlo otra vez. Es un poco una tortura, porque cada vez que te metes ahí a cantar tienes que retrotraerte y pensar por qué escribiste esa canción. Algunas veces es duro, pero es que también nos gusta pincharnos, somos un poquito masoquistas (risas).
Hablando de conciertos, retomáis la gira el 2 de abril en La Riviera (Madrid), ¿habrá sorpresas?
Fran: Es la presentación de 'Viaje Iniciático' en Madrid y va a ser un concierto muy especial. Vamos a tocar todo el disco, un concierto de dos horas, estamos ya como Raphael (se ríe).
Sean: Vamos a intentar traer a Miguel de Maga, somos muy amigos desde hace ya tiempo. Va a ser un directo con mucha energía y llevamos también un espectáculo de luces exclusivo.
Acabáis de estrenar videoclip de 'Nivel Inexperto', ¿qué historia cuenta?
Sean: El vídeo es muy acorde con la canción. Habla de alguien que nos maneja desde arriba y de esa sensación de intentar llegar a un sitio con muchas dificultades. Y aunque lo consigues, en realidad es el de arriba, que te tiene atado y las cosas ocurren sin más. Lo hemos grabado en Murcia, en un enclave muy especial en el que hacía tiempo que queríamos grabar algo.