El 11 de junio de 2004, cuatro años antes de que protagonizaran una inesperada y sonada ruptura, Carlos Lozano y Mónica Hoyos daban la bienvenida a su primera y única hija en común. Luna -así decidieron llamar a esta niña- llegaba en plena cresta del éxito de estas dos celebrities patrias, cuya relación ha sufrido algunos altibajos después de que decidieran poner punto y final a su historia de amor hace 15 años.
Han tenido muchos momentos de camaradería, pero también se han tirado los platos a la cabeza en los platós de televisión, sobre todo cuando irrumpió en escena la archienemiga de Mónica y ex de Carlos, Miriam Saavedra, que llegó a participar junto a la modelo peruana en el reality de convivencia más famoso de la pequeña pantalla. Tormentosas etapas que ya forman parte del pasado de los protagonistas de nuestra noticia, que lograron enarbolar la bandera blanca a tiempo para mantener la mejor imagen ante los ojos de su tesoro más preciado, su hija.
“Con Mónica, todo bien. […] La verdad es que no pregunto nada a Mónica de su vida solo hablamos de temas relacionados con Luna. Yo hago mi vida y Mónica la suya. Espero que lo pase bien con quien quiera estar”, se sinceraba recientemente el presentador de ‘Sálvame’ en una entrevista con ABC. Un trato cordial que ha sido demostrado por la propia Luna, que fotografiaba a sus padres cenando junto a ella días antes de que Hoyos se embarcara en ‘Pesadilla en el Paraíso’, el reality que se estrena el próximo jueves 8 de septiembre en Telecinco.
De Luna sabemos, gracias a una entrevista que coincidió a la revista ¡Hola! en su puesta de largo, que le encanta la música (canta, toca el piano y la guitarra), que está dispuesta a hacer sus pinitos en el mundo de la moda, que no está entre sus planes ser un personaje público y que se sacará el doble grado de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales porque debatir es una de sus grandes pasiones, entre otros rasgos de su personalidad.
De hecho, su padre agradece que quiera mantenerse al margen de los medios. “Estoy muy orgulloso de mi hija, la adolescencia es muy suave, es muy madura para la edad que tiene y es muy inteligente”, se le caía la baba al hablar de la joven, que ha decidido marcharse de nuestro país para seguir formándose: “Se va a Inglaterra a estudiar, estoy deseando”, comentaba a nuestros compañeros de Europa Press.