Lucía Dominguín ha vuelto a ser abuela. Jara, la tercera de sus cuatro hijos, se ha convertido en madre por primera vez. La hermana de Miguel Bosé ha ido relatando los emocionantes días que ha vivido en familia a través de sus redes sociales. "Esta foto tan sencilla es muy importante. Dos seres tan especiales caminando hacia un destino que ya os contaré. Empiezan una aventura, la aventura de sus vidas. Ya os iré contando, solo pido buenas vibraciones para que sea así y así será. Buen día", escribía el día que su hija ingresó en el hospital para dar a luz.

Horas después anunciaba que había llegado a sus vidas "la mayor alegría del universo". El nacimiento del recién nacido no es su estreno como abuela. Lucía Dominguín tiene dos nietas más, las hijas de Bimba Bosé, Dora y June, que tienen 18 y 11 años respectivamente. "¡Viva la vida! Gracias a la mejor pandilla por vuestros mensajes de apoyo y amor", decía la emocionada abuela tras el nacimiento de su nieto.

Su cuenta de Instagram se ha llenado de mensajes de felicitación por el nacimiento del recién nacido. Uno de ellos ha sido Olfo Bosé, hijo también de Lucía Dominguín. "Vamos con esta familia de luz a brillar en la oscuridad. Bienvenido. Abrazamos la esperanza de una nueva humanidad", escribía públicamente el hermano mayor de Jara.

Otra de las personas cercana a la familia que ha reaccionado a esta noticia ha sido Nacho Palau, ex de Miguel Bosé. "Mi querida Jarina. No puedo ser más feliz el día de hoy. Estaba esperando desde hace tiempo que me hicieras tío y mucho has tardado ¡Pero qué bonito es! Felicidades, Samu, bonito. Os quiero infinito a los tres", escribía el escultor. "Y nosotros a ti", le respondía Lucía Dominguín dejando claro cuál es la buena relación que mantienen.

Jara es la más desconocida de los hijos de Lucía Dominguín. Estudió en un internado de Badajoz y en Reino Unido. En una entrevista que concedió a ABC en el año 2016, ella misma explicó que en su casa siempre le dejaron desarrollar la parte creativa y que, si no quería ir al colegio, la dejaban "quedarse en casa viendo la tele y sentada en un escritorio con pinturas o cartulinas para dar rienda suelta a su imaginación".

Una vez terminada su formación, Jara volvió a España y fundó una firma de zapatos con dos amigas. Siempre se ha mantenido alejada del foco mediático y ha demostrado tener una gran unión con el resto de sus hermanos.