Fue en 2018 cuando Andrés Iniesta puso rumbo a Japón tras haber fichado por uno de los equipos de la liga nipona, el Vissel Kobe. Con él se fueron su mujer, Anna Ortiz, y sus hijos. Por aquel entonces, la pareja tenía únicamente a los tres mayores, Valeria, Paolo Andrea y Siena, pero durante los cinco años que han pasado en el país asiático llegaron los dos benjamines de la familia, Romeo y Olimpia. La aventura japonesa del clan ha llegado a su fin: el futbolista valora todavía cuál será su próximo destino, pero, por lo de pronto, tras decir adiós a la bahía de Osaka, disfrutan de unas vacaciones en Ibiza. Allí se ha pronunciado el primer posado de la familia al completo.
El manchego y su familia han decidido tomarse unos días de descanso antes de afrontar una próxima etapa todavía incierta, aunque se rumorea que el próximo destino del futbolista podría ser el Inter de Milán. Y han elegido la isla Pitiusa para relajarse antes de los posibles nuevos cambios que están por llegar. Estos días de vacaciones han estado llenos de planes, y de muchos momentos familiares. Es más, vía redes sociales la pareja ha posado por fin con sus cinco hijos tras el nacimiento de Olimpia, el pasado marzo.
Aunque ya habían mostrado una imagen de los niños, poco después de la llegada de la benjamina, lo cierto es que faltaba un posado familiar al uso que incluyese a los dos progenitores. Finalmente la instantánea se ha producido, y Ortiz la ha compartido con sus seguidores en su perfil de Instagram. Ha sido en su cuenta donde hemos podido ver qué ha estado haciendo el clan durante sus vacaciones: mucha piscina, días de chiringuito frente a la costa ibicenca y algún que otro reencuentro, como el que se ha producido entre los pequeños y sus abuelos maternos, los padres de Anna. Puedes ver todos los planes de la familia dando 'play' al vídeo que encabeza esta noticia.
Andrés y Anna comenzaron su relación allá por 2008. En esta década y media juntos ha habido hueco para mucho hito vital. El primero fue su estreno en la paternidad y maternidad, respectivamente, en 2011, con el nacimiento de su primogénita, Valeria. El siguiente fue su boda, repleta de futbolistas compañeros del de Albacete y cuatro años después de empezar su historia de amor.
Durante los años de Iniesta en el Barça, en los que la familia estaba instalada en Cataluña, nacieron sus dos siguientes hijos, Paolo Andrea y Siena, en 2015 y 2017. Fue durante esta etapa en España cuando se produjo uno de los episodios más complicados de su vida, tras perder, a los ocho meses de embarazo de la decoradora a un bebé que esperaban pocos meses antes de que llegase Paolo.
En 2018 la familia hizo las maletas para dar comienzo a su etapa en el país nipón. Fue allí donde llegaron los dos benjamines de la familia, Romeo y Olimpia. Una temporada, la que han pasado en Japón que se cierra ahora, a falta de conocer cuál será su próximo destino.