Aitor Ocio se convirtió en un rostro conocido durante la década de los 2000, cuando jugó, durante varios años en distintos clubes de fútbol. El defensa vasco acumuló un buen número de temporada seguidas en Primera División, llegando a sumar varios títulos durante su etapa en el Sevilla FC. En lo referente a la crónica social, el ascenso de Ocio en este campo se produjo a su evidente proyección como uno de los jugadores del momento, y debido también a su relación con Laura Sánchez, un matrimonio del que nació Naia, su única hija. El de Vitoria acostumbra a sacar pecho de la joven, y ahora se ha sincerado en profundidad sobre su faceta como padre.
Naia Ocio Sánchez cumplirá dieciocho años este 2024. Hasta ahora, la joven estudia bachillerato con muy buenos resultados, según lo mucho que presume su padre en redes sociales de sus logros académicos. Además, combina su faceta de estudiante con la de futbolista, siguiendo los pasos de Aitor: tras varios años formando parte de categorías infantiles y juveniles de varios clubes vascos, actualmente juega como delantera en las filas del primer equipo del Bizkerre. El defensa se suele referir a ella cariñosamente como 'vikinga'.
Ahora, el deportista, que se ha reconvertido a empresario de éxito en los últimos años, ha concedido una entrevista al diario Mundo Deportivo. En conversación con este medio, se ha sincerado respecto de sus planes para el nuevo año, de cómo mantiene su espectacular forma física, pero también ha abordado su paternidad, revelando cómo gestiona que Naia quiera dedicarse a lo mismo que él, y cuáles son los principios que intenta inculcarle.
Ocio reconoce encontrarse en un buen momento en lo personal y en lo profesional, y espera que esto siga así durante los próximos doce meses. El futbolista quiere seguir "aprendiendo y evolucionando" en cada una de sus facetas empresariales y personales. En relación a Naia, reconoce que desde pequeña quiso que probase y conociese distintos deportes para descubrir qué le gustaba más, pero, tras intentarlo con varios, a los ocho años la niña le dijo que quería jugar al fútbol. "Por supuesto desde ese día hasta hoy la he apoyado en todo momento para llegar hasta donde ha llegado manteniendo la ilusión, constancia y sacrificio que le supone ya jugar al nivel que lo está haciendo", ha reconocido.
La hija de Aitor y Laura Sánchez, cuya custodia fue objeto de guerra judicial durante años, comenzará el próximo año sus estudios universitarios en Estados Unidos, gracias a una beca que ha conseguido como futbolista. Porque para Ocio, como padre, la formación y la educación han estado siempre por delante del deporte. En la charla con el citado medio, no obstante, el exdefensa ha reconocido que siempre ha intentado transmitirle que, por encima del deporte y la formación, lo primero es "la integridad como persona". El respeto, la humildad o la generosidad son valores que, en su opinión, deben prevalecer a otros típicos del deporte como el sacrificio o la superación.