Hoy, 17 de marzo, se cumple un año de la muerte de Laura Valenzuela. La actriz y presentadora falleció a los 92 años de edad tras haber pasado una delicada época de salud. Aunque fue el primer rostro conocido de la televisión, permanecía retirada desde hace años. Sin embargo, su pérdida conmocionó al público y a sus familiares, entre los que se encuentra su hija, Lara Dibildos, quien ahora ha querido homenajearla.
Lara, hija de Valenzuela, actuaba hace solo unas horas en el Teatro Real Carlos III de Aranjuez, en la Comunidad de Madrid. Al finalizar su obra ‘Estado de alarma’, la actriz no dudó en dedicar unas palabras a su madre con motivo del primer aniversario de su fallecimiento: “Hace un año, ella falleció el 17… Pero a esta hora, ya estábamos despidiéndonos. Así que si me dejan, me gustaría dedicárselo”, pronunció mientras lanzaba un beso al cielo.
Sin embargo, esa no fue la única referencia que Dibildos hizo a su madre ayer y es que en una escena de la función era ella misma la que tenía que interpretar al personaje que había perdido también a su mismo ser querido: "Pues porque yo también perdí a los míos, ¿tú qué te crees? ¿Qué eres el único? Mi padre nos abandonó cuando yo era un bebé, no sé nada de él. Y mi madre. Mi madre murió cuando yo tenía 17 años. ¿Sabes una cosa? Que no pasa ni un día que no me acuerde de ella", pronunció entre lágrimas e identificándose con las palabras del guion.
Al finalizar, la también presentadora reconoció a Europa Press que no fue fácil subir al escenario: “Me ha costado, sabía que me iba a emocionar y que tenía que tirar. No quería derrumbarme y es difícil”, confesó después de que la pieza señalada volviese a ser todo un éxito y repleto “de risas del público”.
Sin embargo, la ex de Álvaro Muñoz Escassi explicó que, a pesar de la tristeza que le supone el pensamiento de su figura materna, el día de hoy también le hace sonreír por un motivo concreto: “A la vez es emocionante porque yo sé que ella estaría súper orgullosa. Si me ve que sigo trabajando, que sigo currándomelo y que sigo un poco lo que ella me enseñó que era trabajar, trabajar, currármelo y ganarme mi sitio, pues yo sé que ella estaría orgullosa”, ha afirmado.
Y es que no hay un solo momento en el que Dibildos haya dejado de pensar en su progenitora aunque ha señalado al mismo medio que estos días son un poco más difíciles: “Me emociono enseguida porque cuando llegan estos días es como que te pega otro bajón, ya estás mejor, y los recuerdos todo el día. Es complicado”. No solo para ella sino también para sus hijos, de los que ha querido sincerarse sobre la ausencia que notan tras la pérdida de “su nona”, a la que ha definido como “la mejor abuela del mundo”.