El pasado mes de agosto, la selección femenina de fútbol lograba un hito histórico al alzarse por primera vez con la Copa Mundial de la FIFA. Un logro deportivo sin precedentes para el combinado femenino español, que hasta entonces no había pasado de la fase de octavos y que dio cuenta del buen momento que vive este deporte en nuestro país. La gesta sirvió para que el público pusiese caras y nombres a muchas de las jugadoras. Una de las protagonistas de dicha victoria fue Jenni Hermoso, cuyos logros profesionales no solo le hicieron ganar el torneo, sino también recibir el Balón de Plata del mismo. La madrileña siempre se ha apoyado mucho en su entorno más próximo: así es su familia, de sus padres a sus hermanos y demás parientes.
La delantera, que milita en las filas del Tigres de la UANL Femenil mexicano, lleva meses siendo noticia. Su condición de actual campeona del mundo le ha valido distintos reconocimientos en revistas como el Financial Times o Time, que la han señalado como una de las mujeres más influyentes del mundo. A todo lo logrado en el campo de fútbol se sumó, además, una segunda trama: la derivada del beso en los labios que le dio Luis Rubiales durante la celebración del torneo, que ella negó haber consentido, recibiendo el apoyo de sus compañeras.
La polémica ha derivado en el conocido como Caso Rubiales, que se ha alargado durante los últimos meses y que esta mañana ha vuelto a estar de actualidad al conocerse que el que fuera presidente de la Real Federación Española de Fútbol tendrá que sentarse en el banquillo por lo sucedido y por las supuestas coacciones a la futbolista y sus allegados para que esta grabase un vídeo en el que restar importancia públicamente al beso. La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha desestimado sus recursos, por lo que Rubiales se enfrenta a un juicio por un delito contra la libertad sexual y otro de coacciones.
En todo este tiempo, Jenni ha estado muy arropada por los suyos. La jugadora ha reivindicado con orgullo siempre sus orígenes, en el barrio madrileño de Carabanchel, donde tuvo su primer contacto con el deporte. Una familia que ha permanecido en un discreto segundo plano, pero de la que ella ha hablado en entrevistas y apariciones públicas, de la que ha presumido puntualmente en redes sociales y que lleva con orgullo, a través de distintas palabras y símbolos, tatuada en su propia piel.
Sus padres son Rafael Hermoso y Soledad Fuentes, originarios del mencionado barrio. Aunque han preferido mantenerse alejados del foco, ella sí ha reivindicado la importancia que han tenido no solo en su trayectoria personal, sino también en su decisión de hacer del deporte su profesión. Ambos la acompañaban a los partidos y apoyaban desde pequeña en todo lo relacionado con sus primeros pasos en el deporte. De su progenitora decía Hermoso que es su "ejemplo a seguir" y que se trata de una mujer "fuerte, valiente, luchadora".
Un papel igual de importante han jugado en su vida también sus dos hermanos. Jenni tiene un hermano y una hermana mayores. Son Rafael y Silvia Hermoso, que también han sido un importante apoyo para su hermana. Ambos han tenido una cierta proyección mediática. De Rafa, los medios dieron seguimiento a su declaración ante la Audiencia Nacional por el caso Rubiales, y la deportista ha compartido imágenes con él en redes sociales, en las que él es bastante activo y da cuenta no solo del estrecho vínculo que mantiene con Jenni, sino también con otras jugadoras de la selección. Por su parte, Silvia fue también interrogada al respecto, defendiendo a ultranza a la deportista.
Otros familiares de los que Hermoso ha hablado públicamente son sus abuelos. De uno de ellos ha dicho que era portero del Atlético de Madrid y que comenzó a dedicarse al fútbol por él (de hecho, fue él quien le ayudó de pequeña, cuando sufría discriminación por querer dedicarse a este deporte. A otra abuela la tiene presente en forma de clavel con un tatuaje, y es a quien suele dedicar sus goles desde que falleció hace un par de años. También se ha referido en alguna ocasión a su sobrina, que parece seguir sus pasos en el mundo del fútbol y a quien ha tenido muy en mente en su lucha por los derechos de las mujeres futbolistas.