Isabelle Junot soplaba las velas de su 33 cumpleaños el pasado 19 de abril. Un día especial que celebró con algunas de las personas más importantes de su vida, como su marido, Álvaro Falcó, o su círculo más cercano, al cual reunió para pasar una cálida velada.

Sin embargo, durante la celebración fueron varias las ausencias que se hicieron notar, como la de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, que no asistieron al evento debido a otros compromisos. 

Por estos últimos era preguntado el marqués de Cubas a su salida, que restó importancia a la falta de la pareja: “Les queremos mucho, mucho, les adoramos”, recalcó a Europa Press, dejando claro que la relación entre los cuatro se mantiene intacta.

De hecho, a pesar de que ninguno de los dos ha podido acudir en esta ocasión, sí que lo han hecho en otros momentos especiales para el matrimonio, que daba la bienvenida en junio de 2023 a su primera hija en común, Philippa, a quien bautizaron el pasado mes de marzo.

A este evento tan especial no faltaron ni Onieva ni la prima de Álvaro, quien protagonizó una de las imágenes más destacadas de la celebración sosteniendo al bebé. "Mi querida Philippa. Eres única… La pureza de tu sonrisa ha venido para iluminar nuestras vidas. Te querremos siempre. Bienvenida a los bendecidos por Jesús", publicaba Tamara en sus redes sociales como recuerdo. Un posado al que Isabelle respondía días después en una alfombra roja. “La verdad que le queda increíble”, respondía la ‘coach’ tras las incesantes preguntas sobre si el matrimonio iba a dar el siguiente paso.

Una muestra de la gran relación entre ambas, algo que ya habían dejado claro con anterioridad. "Es un poco mi pilar. Por muy ocupada que esté, siempre encuentra un momento para preguntarme cómo voy", afirmaba la aristócrata de familia danesa.

La hija de Junot y Falcó llegaba unas semanas antes de uno de los golpes más duros del que es ahora marqués de Cubas, la muerte de su madre, Marta Chávarri a los 62 años. Tres meses después, el único heredero de la aristócrata organizaba un funeral en la iglesia de Los Jerónimos de Madrid acompañado de su mujer, pero también de su prima. La marquesa no pudo estar al lado de Álvaro tras el fallecimiento de Chávarri debido a que se encontraba en su luna de miel en Sudáfrica tras casarse con Íñigo Onieva.

La socialité vivió el dolor de la pérdida de su tía en la lejanía debido a que no pudieron cancelar el viaje, pero fue una de las que arropó al marqués de Cubas en la misa. “He podido hablar con ella y está muy triste con la noticia. La pobre quería venir a toda costa, pero le ha pillado de viaje de novios. Al final, le ha sido imposible cambiar el viaje hoy, por lo que no va a poder venir”, explicaba Álvaro.