En el año 2011, Miguel Bosé anunció por sorpresa en sus redes sociales que se había convertido en padre de dos mellizos, Diego y Tadeo, nacidos mediante un proceso de gestación subrogada, admitiendo ser el "hombre más feliz de la tierra". Dos años después, el cantante hizo un importante matiz en una entrevista para Shangay. “No tengo dos hijos, tengo cuatro”, revelaría, en referencia a Ivo y Telmo, hijos biológicos de Nacho Palau, con quien mantenía una relación por entonces. La ruptura de la pareja en 2018 separó a los dos pares de mellizos, y abrió una guerra judicial por su filiación. El escultor ha hablado ahora sobre cómo es el vínculo que mantiene con Diego y Tadeo.

Las más de dos décadas de relación sentimental entre Miguel y Nacho se vivieron totalmente en secreto, aunque Palau estaba totalmente metido en la familia de Bosé y trabajaba de hecho en su equipo. Es por eso que cuando se supo de la paternidad del artista, se presumió que había sido en solitario, algo que él mismo confirmaba en la mencionada charla con la revista. "No quería hacerlo con una pareja. Así tengo a dos hijos maravillosos que llevan mis apellidos y que nadie me puede quitar", expresaba sobre su decisión de formar una familia.

Lo cierto es que, durante su historia de amor, ambos se estrenaron con la paternidad con siete meses de diferencia y procesos paralelos de subrogación. Según Nacho mantiene reiteradamente, con la intención de formar una familia común. El Tribunal Supremo dictaminó el año pasado que los cuatro niños, de trece años, no tienen relación fraternal entre ellos, y son hijos exclusivamente de su respectivo progenitor biológico, no de ambos. La justicia sí estableció, en cualquier caso, un régimen de visitas para que los cuatro pasasen los períodos vacacionales juntos.

El exconcursante de 'Supervivientes' ha alertado de que este punto no se está cumpliendo. Y por eso ha decidido presentar una demanda de ejecución de la sentencia a quien fuera su novio durante más de veinticinco años. Así lo anunciaba este mes de julio en una entrevista concedida a la revista Lecturas, en la que señalaba que Miguel no le "deja ejercer como padre", en sus propias palabras. Con sus palabras, además de hablar de cómo ha evolucionado su trato y contacto con el intérprete de éxitos como 'Bandido' o 'Como un lobo', ha explicado cómo están las cosas entre él y los hijos de este, así como respecto de los cuatro niños entre sí.

Palau reconoce que no ve "en todo el año" a Diego y a Tadeo, pero que cuando van a Chelva (Valencia), donde vive el escultor, "disfrutan una barbaridad" y "se relajan". Eso pese a que, según él, Bosé está "siempre" llamándoles y preguntándoles dónde están y qué hacen, "controlándolo todo". El exrobinsón opina que quien fuera su pareja le mina y le complica el poco tiempo que puede pasar con los pequeños. Pese a ello, tiene claros los sentimientos que le unen a ellos: "Sé la relación que tengo con los cuatro. Sé que los niños me quieren [...] Pero la relación se va perdiendo", admite, señalando que el cantante los está poniendo en su contra pese a que ellos le llaman "papá".

Nacho se niega a creer que los niños no quieran visitarle y pasar tiempo con Ivo y Telmo, apuntando que sus días más felices los han pasado con él, "corriendo de un lado para otro en el pueblo", y quejándose de que viven en un castillo, "en una burbuja, como vivía yo con Miguel". Denuncia, por ejemplo, que su ex controla las videollamadas que Diego y Tadeo le hacen. "Noto cuándo hablo libremente con ellos y cuándo no. Se cohíben", explica. Además, el escultor ha admitido que el vínculo entre los cuatro hijos parece no resentirse. "Se quieren mucho. Son hermanos, ¡se han criado juntos", ha apuntado en la citada entrevista.