Rosario Flores es de esas caras conocidas que lo, casi, desde antes de haber nacido. El hecho de pertenecer a una de las más grandes sagas de artistas de nuestro país, el clan Flores, ha derivado en el que público esté familiarizado con ella desde hace décadas. Un tiempo en el que la hija pequeña de Lola Flores y Antonio González 'El Pescaílla' ha desarrollado una exitosa y reconocida trayectoria musical y artística. También en el que ha formado una familia a la que siempre ha preferido proteger del foco mediático. Recientemente se ha sincerado sobre cómo es su relación con sus dos hijos, Lola Orellana y Pedro Antonio Lazaga: esto es lo que ha dicho sobre el vínculo materno filial.

Una veintena de álbumes de estudio y recopilatorios, papeles en películas y series de televisión, un buen puñado de himnos en el imaginario colectivo popular, nominada a un premio Goya, Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes y premio Grammy Latino por la Excelencia Musical. Son solo algunas de las credenciales que lleva a sus espaldas la hermana menor de Lolita y Antonio Flores desde que debutase como artista hace más de tres décadas. Mucho más desconocida es, paralelamente, su faceta como madre.

La intérprete de éxitos como 'Mi gato' o 'Cómo quieres que te quiera' ha tenido algunas relaciones sentimentales conocidas, y fruto de dos de ellas ha tenido a sus dos hijos. De su historia de amor con el artista argentino Carlos Orellana nació en 1996 su primogénita, Lola Orellana. Una década después, de su discreto matrimonio con el productor Pedro Lazaga, llegó el benjamín de la familia, Pedro Antonio Lazaga.

Ambos han preferido mantenerse, por ahora, al margen de la primera línea mediática, aunque lo cierto es que siguen los pasos de su madre y el resto de parientes en el universo artístico. Lola, de veintiocho años, se ha centrado en la producción, aunque también escribe y pinta. Pedro Antonio, que cumplió la mayoría de edad el pasado enero, estudia música, toca la guitarra y el cajón, y ha acompañado ya a su madre en alguna ocasión sobre el escenario, como percusionista.

Pese a la mencionada discreción de ambos, su madre sí ha querido tener en más de una ocasión gestos de cariño a su descendencia. Así ocurría en los últimos días, al referirse a ellos durante la promoción de su nuevo trabajo discográfico, 'Universo De Ley', con el que celebra sus más de treinta años de carrera musical. En una entrevista concedida a finales de noviembre a Cadena Dial, junto a Rafa Cano en el programa 'Dial Tal Cual', Flores repasaba el proceso de creación de este álbum, en el que interpreta muchos de sus temas más conocidos con en duetos con grandes nombres de la escena hispana.

En la mencionada conversación con Cano, Rosario era preguntada al respecto de qué papel tienen sus dos hijos en su carrera, si le ayudan u orientan en sus pasos profesionales. "Mis hijos son muy fans míos, me admiran mucho los dos y me cuidan muchísimo. Me dan su opinión, me dicen 'Ay mira mamá, qué canción más bonita', o '¿Por qué no cantas con este artista?' Luego decido yo siempre, pero ellos me dan su opinión y me dan sus consejos", reconocía al locutor.

Pero, además, la cantante y actriz reconocía que la relación con Lola y Pedro Antonio cambia sustancialmente dependiendo de si ella está en los escenarios o en un contexto doméstico y familiar. "Es que de verdad que em admiran mucho como artista, a mí es una coa que me impresiona, porque cuando vienen conmigo de gira me tratan y me cuidan que no veas, y cuando estoy en casa como mamá no me hacen ni caso", contestaba entre risas.

Por último, ha reconocido, con respecto a cómo ha sido la educación que les ha dado, que se recuerda a sí misma a su propia madre en su relación con ellos: "Soy protectora, pero me gusta que sean independientes y vivan su vida. Que sepan que cuando me necesiten ahí voy a estar, pero no soy una madre pesada de llamar veinte veces a mis hijos", ha concluido.

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