El pasado mes de diciembre, Alejandra Rubio y Carlo Costanzia celebraron uno de los momentos más importantes de sus vidas: el nacimiento de su primer hijo, Carlo, en honor a la tradición familiar paterna. El parto, programado por recomendación médica debido a una diabetes gestacional, se realizó en el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid. Aunque fue un proceso largo que requirió una cesárea, Alejandra salió del hospital dos días después mostrando optimismo y buen ánimo, acompañada en todo momento por Carlo. En su primera entrevista tras el nacimiento, Carlo compartió su felicidad en el programa '¡De viernes!' y describió a su hijo como "comilón, muy bueno y tranquilo". Estas palabras reflejan la ilusión de una pareja que, pese a su habitual discreción, no ha podido evitar transmitir su felicidad en este nuevo rol como padres.

En las últimas horas, la pareja ha dado comienzo a la que es su primera escapada familiar tras el nacimiento del pequeño. Alejandra ha compartido en redes sociales algunas instantáneas del viaje, sorprendiendo a sus seguidores con esta muestra de su nueva vida como familia. Durante el trayecto hacia un destino en el Mediterráneo, Alejandra ha publicado fotos de Carlo al volante mientras ella iba en la parte trasera cuidando al bebé. También ha compartido un amanecer antes de las 7:00 a.m. y el impresionante paisaje montañoso del lugar que han visitado.

A pesar de estas publicaciones, ambos han decidido seguir protegiendo la privacidad de su hijo, evitando mostrar su rostro en redes sociales, una postura que ya habían anunciado durante el embarazo. En una de las publicaciones más destacadas, Alejandra ha compartido un vídeo grabado con el móvil colocado en el suelo, donde aparece bailando junto a Carlo al ritmo de ‘Beautiful Things’ de Benson Boone. Bajo un cielo despejado, ambos sonríen, saludan a la cámara y transmiten la felicidad de este momento tan especial. Con este viaje, la pareja ha demostrado que está disfrutando al máximo de esta nueva etapa. Un comienzo de año lleno de emociones para esta familia que empieza a escribir su historia.

Rubio y Carlo han iniciado una nueva etapa en el barrio de Aravaca, donde comparten un piso que refleja la intimidad y el estilo de su vida familiar. La vivienda, ubicada a pocos kilómetros de la Puerta del Sol y cerca de la casa de Terelu Campos, les permite mantener un equilibrio entre privacidad y cercanía con sus seres queridos. Este piso, en el que Alejandra residía previamente, cuenta con una distribución funcional que incluye una terraza amplia con vistas despejadas, un espacio que se ha convertido en uno de sus rincones favoritos.

El barrio de Aravaca es conocido por su conexión con el centro de Madrid y por ofrecer un entorno adecuado para familias jóvenes. En los últimos años, ha crecido con la incorporación de nuevas urbanizaciones y la expansión de áreas verdes, convirtiéndose en un lugar atractivo para quienes buscan un estilo de vida tranquilo sin renunciar a la proximidad de la ciudad. Aquí, Alejandra y Carlo han encontrado el escenario perfecto para disfrutar de su primera experiencia como padres, rodeados de un entorno que combina comodidad y funcionalidad.

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