Jessica Bueno y Luitingo veían nacer su romance a finales de 2023, cuando ambos coincidían como concursantes en la casa de ‘Gran Hermano VIP 8’, lugar en el que la modelo rompía con su expareja Pablo Marqués para apostar por su historia con el cantante. Entonces, ambos comenzaban una relación en la que no dejaron de dar grandes pasos que les llevaban a convertirse en el apoyo incondicional el uno del otro según ellos mismos mostraban en sus redes sociales.

Es precisamente en estas últimas donde saltaban las alarmas acerca de su posible crisis unos días después de que el nombre de cada uno dejase de aparecer entre los seguidores del otro. Poco tiempo después, eran ellos mismos los que el pasado domingo, 23 de febrero, confirmaban su ruptura en un comunicado en el que aseguraban que después de mucha “lucha para que funcionara”, su amor no había “podido con todo”.

Ahora, ha sido el sevillano quien ha reaparecido en sus redes sociales con una publicación con sus padres como protagonistas, a quienes ha dedicado unas palabras por su importante papel en el momento complicado.

Tras su ruptura con Jessica, Luitingo no está pasando una de sus mejores etapas, donde hace unos días confesaba en ‘TardeAR’ que “no cogía el teléfono” ni a sus amigos. Sin embargo, con sus palabras en el mismo formato dejaba evidencia del gran apoyo que están suponiendo sus progenitores: “Estoy con mis padres todo el día allí en su casa”, declaraba.

Ahora, el cantante ha compartido en su perfil de Instagram una fotografía en la que, a orillas de un lago, posa sonriente junto a los anteriores, a quienes se ha dirigido de forma directa: “Gracias por aguantar todo conmigo. Cada día me alegro más de la casa en donde nací”, ha comenzado asegurando.

Sin embargo, en el mismo mensaje ha querido pedir “perdón” a sus padres por el momento que atraviesan junto a él: “Sé cómo lo estáis pasando, pero seremos fuertes y todo volverá a tener luz. Papá, Mamá, sois lo que más quiero en este bonito y a veces difícil mundo”, ha concluido.

Así, el ya exnovio de Bueno ha dejado evidencia del estrecho vínculo que ha construido a lo largo de sus 34 años de vida con su madre, Rocío Magro, y su padre, Sele de Triana, que recientemente se sometía a una intervención por el tumor maligno que padece en el estómago.

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