El 29 de septiembre de 1994, Belén Rueda se estrenaba en la maternidad con la llegada al mundo de su primogénita. La actriz y su marido, el productor Daniel Écija, decidían llamar a la pequeña igual que su ya famosa madre, que en aquel momento era uno de los rostros más conocidos de la pequeña pantalla de nuestro país gracias al éxito de VIP Noche, el espacio que presentaba junto a Emilio Aragón, y otros programas.

Aún no había dado el salto a la interpretación, eso llegaría tres años después, en 1997 con 'Médico de familia', pero con el nacimiento de su primera hija, Belén se enfrentaba al papel más importante de su vida: el de madre. Desde ese momento, la intérprete se volcó en la pequeña. Poco imaginaba entonces la actriz que aquella niña seguiría sus pasos en el mundo de la interpretación. Y no puede sentirse más orgullosa de Belén, que hace unas semanas le hacía vivir a su madre un emotivo momento durante su pedida de mano.

Aunque siempre ha mantenido su vida privada alejada del foco mediático y no es habitual que Belén Rueda hable de sus hijas, el hecho de su primogénita también sea actriz ha facilitado que ambas abran un poco la puerta de su intimidad y conocer algo más sobre su relación. Madre e hija están muy unidas (también lo están con Lucía, la otra hija nacida del matrimonio de la actriz y Daniel Écija).

A través de las redes sociales de Belén Écija, que anunció el pasado mes de septiembre su boda, hemos podido ver que tienen un vínculo muy especial y que ambas comparten su pasión, además de por la interpretación, por el mar, y que siempre que sus agendas se lo permite aprovechan para disfrutan de un tiempo juntas. Y si sus compromisos profesionales se lo complican, no dudan en visitarse en los rodajes, tal y como hizo recientemente Belén Écija.

Por supuesto, cada año, madre e hija encuentran algún hueco para hacer alguna escapada en familia para disfrutar de unos días de descanso. Unos días que siempre aprovechan al máximo en los que hacen diferentes planes como ir a la playa o recorrer algunos rincones de ensueño.

También a través de sus redes sociales, la joven actriz ha demostrado en más de una ocasión el profundo amor que siente por su madre, que es uno de los pilares fundamentales en su vida. Siempre ha estado a su lado y le ha dado las lecciones más importantes que se pueden dar en la vida. "Gracias por alimentarme el alma con tu luz. Gracias por enseñarme a amar. Gracias por enseñarme a valorar, a crecer, a compartir, a reír, a ser fuerte, independiente y a disfrutar de lo que hago. Todo eso y mas gracias a ti... Qué suerte caminar a tu lado y agarrarnos siempre fuerte. Un ángel en la tierra con luz propia. Y ante todo una guerrera. Te quiero", le ha escrito la actriz, quien además ha confiado en la diseñadora Valenzuela, una de las favoritas de su madre, para su vestido de novia. Un detalle que demuestra la conexión que existen entre madre e hija, quien además parece que comparten gustos en lo que a moda se refiere.

Siendo su madre una de las actrices de mayor éxito de nuestro país y dedicándose ella al mundo de la actuación, no es de extrañar que Belén Écija haya convertido a su madre en su principal referente (además de Marion Cotillard). Ella es el espejo en el que se mira aunque su madre la deja "volar sola". Algo que a Belén Écija le parece "lo más bonito".

Belén Rueda confía en el talento de su hija, pero siempre que lo necesita está ahí para ella. "Me da muchos consejos cuando se los pido", comentaba la joven actriz, durante la presentación de la cuarta temporada de 'Madres, amor y vida', la primera ficción en la que ha podido trabajar con su madre (en publicidad sí habían trabajado juntas) y que ha sido una experiencia de la que se llevó un gran aprendizaje.

Compartir rodaje con su madre es muy especial. "Es muy guay, muy bonito, no había hecho nada con ella, en publicidad sí. Es raro, además hicieron la bromita que no podemos hacer spoiler de madre e hija, que no hay manera de que nos separen. Es guay, es bonito trabajar con una madre, salen cosas distintas", comentó poco después en un evento a los compañeros de Europa Press.

Desde entonces, no han vuelto a trabajar juntas, pero le encantaría. "Sería un placer", decía Belén, que prefiere primero labrarse su propio camino. "En el futuro, cuando las dos tengamos la misma fuerza, trabajaremos juntas".

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