El día no podía ser más primaveral. Con un cielo azul y un sol de justicia, el clan flores se congregó en la iglesia madrileña de Nuestra Señora de la Moraleja para que Noah, el primogénito de Furiase y Sierra, recibiera el Santo Sacramento, en una celebración que se alargó también durante la tarde y en la que pasó de todo.
Gracias a Mariola Orellana y a Rossi de Palma, fuimos testigos de lo que comieron, de cómo bailaron y cantaron, de lo mucho que se emocionaron.
Porque siendo una familia de artistas, lo normal es que salgan a la palestra a darlo todo: así fue por ejemplo cuando Miguel Poveda y Lolita 'flamenquizaron' al unísono 'Vámonos', la famosa ranchera de José Alfredo Jiménez: “Que no somos iguales, dice la gente; que tu vida y la mía se van a perder, que yo son un canalla y que tú eres decente, que dos seres distintos no se pueden querer…”.
Todo, ante la atenta mirada de todos los asistentes al evento, que no dejaban de emocionarse y de dar palmas y de vitorear al dúo artístico. Poco después, la madre de Furiase se arrancó a bailar con ese desparpajo que le caracteriza.
También hubo un momento para la madre de Noah, que también se atrevió a cantar junto a su madre una canción que le dedicó a la criatura (y, mientras, sale el padre alabando su arte).
En cuanto al menú, todo parece que giró en torno al jamoncito y a la paella. Enormes perolos adornaban la finca en la que se desarrolló el convite, y que según se ve en los stories estaba de miedo.
Para el postre, además, pusieron entre otros dulces y la tarta unas enormes fuentes de chocolate.
La velada concluyó con la actuación de otros miembros de la familia Flores, como Lucía Fernanda, hija de Antonio Carmona y Mariola Orellana, dejando al público totalmente mudo con su actuación.