Muere el padre de Rudy Fernández a los 66 años
Rodolfo Fernández, padre de Rudy Fernández, ha muerto a los 66 años
Una dura pérdida para el jugador de baloncesto, que siempre ha hablado de su padre como un "superabuelo" para sus hijos
Rodolfo Fernández, padre del jugador de baloncesto Rudy Fernández, ha fallecido a los 66 años. Así lo ha comunicado el Real Madrid, su club, a través de una breve nota en la que "lamentan profundamente" esta dura pérdida y expresan sus condolencias tanto a él como a Marta y Maite, hermana y madre del crack del basket.
El patriarca de este clan, que tal y como nos han mostrado en las cuentas de Instagram de los hermanos Fernández Farrés siempre ha sido una piña, nació en Cataluña. Se formó como ingeniero técnico, y fue el encargado de inculcar a su hijo la pasión por la canasta. Rodolfo comenzó jugando en el Joventut de Badalona, luego fichó por el Sant Josep Obrer, dando el salto así a la Primera División.
Con el tiempo conoció a Maite Farrés, su esposa, con la que quiso formar una familia. Fue entonces cuando su sueño deportivo se paró y Rodolfo Fernández se centró en aquello para lo que estudió. Ya afincado en Mallorca, donde crecieron sus dos hijos, trabajó como ejecutivo de una empresa de ascensores.
Aunque Rudy Fernández siempre ha tratado de proteger a los suyos, su orgullo de hijo ha hecho que su padre se cuele en su feed de Instagram en alguna que otra ocasión. Y siempre para reivindicarle. El último post que le dedicó fue, cómo no, con motivo del día del padre, donde veíamos a Rodolfo cogiendo en brazos a un pequeñísimo Alan, el hijo que el deportista comparte con Helen Lindes. "Sigue luchando, superabuelo", le dedicó.
La familia de Rudy, unida más que nunca tras la pérdida de su patriarca
Rudy se refugia en estos momentos tan complicados en la familia que ha formado con la modelo Helen Lindes, con quien pasó por el altar en un espectacular enclave de Mallorca hace seis años. Los mismos que le arroparon hace tres años, cuando estuvo a punto de abandonar la selección tras el fallecimiento de una de las personas más importantes de su vida, su abuelo, y el repentino aborto de su hermana.
“Me quedaban dos semanas para salir de cuentas y todo iba sobre lo previsto. Empecé a encontrarme mal, y un desprendimiento total de la placenta complicó, y mucho, la vida de nuestra bebé y la mía. Cuando llegaron al hospital y me pudieron hacer una cesárea de urgencia ya no pudieron salvar a nuestra pequeña. Fue todo tan rápido y tan duro que no soy capaz de expresarlos con palabras”, era el testimonio de Marta Fernández, estrella del baloncesto femenino, que se estrenó en la maternidad un año y medio después de este duro episodio.