Los últimos días han sido especialmente complicados para Anita Matamoros tras el accidente que sufrió su perro en su propia casa. Finalmente y después de horas de lucha intensa, el compañero de vida de la influencer ha muerto.
Hace solo un par de horas, tanto Anita como Makoke se mostraban positivas en sus redes sociales antes de que el can se sometiese este mediodía a una resonancia. La influencer ha compartido entonces un mensaje en el que confesaba que “le he llevado a un hospital que me ha dado mucha confianza y me ha dejado tranquila saber que está en las mejores manos con el que parece un equipo increíble”. Sin embargo, ya reconocía que el trayecto había sido horrible debido a que “él no podía moverse y no paraba de quejarse”.
Tras dejar a su perro sedado y sin dolor para poder realizarle de forma óptima la prueba, la joven confirmaba que “en unas horas sabremos los resultados y si está afectada la médula. Si es así, a ver de qué manera”.
A pesar de la firme confianza que la familia tenía en su recuperación, esta no ha podido ser posible y Ringo ha terminado falleciendo. Ha sido su padre, Kiko Matamoros, el encargado de compartir la noticia a través de un comunicado con el que además, ha querido dedicar unas palabras a su hija.
"Adiós, compañero. Fuiste la alegría de Anita y la mía por mucho tiempo. Espero que tengas un viaje placentero y no te salpiquen las lágrimas de cocodrilo de quienes despreciaron tu estabilidad. Te querré siempre y alegrarás mi memoria. Gracias por tu amor, amigo Ringo", ha escrito junto a una fotografía de Ringo, con el que él, tal y como ha afirmado, también pasó grandes momentos antes de divorciarse de Makoke.
El pasado domingo, Makoke apareció visiblemente afectada en ‘Fiesta’, donde contó que el perro de su hija había sufrido un accidente tras precipitarse al vacío desde un tercer piso. La colaboradora afirmó que tenía “todas las costillas rotas. Como está muy mayor, tiene una úlcera en el ojo y no ve bien, se ha movido y se ha caído”, expresó con la duda de no saber cómo se iban a desarrollar los acontecimientos posteriores.
Sin embargo, Anita escribía hoy en sus stories acerca del suceso que “creo que no es necesario contarlo. Puedo entender vuestra curiosidad pero yo no estoy ni preparada ni siento que tenga por qué hacerlo. Espero que lo entendáis”.