{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Desde que el pasado mes de junio María José Suárez anunciase su ruptura con Álvaro Muñoz Escassi, la trama de su separación está copando gran parte de la actualidad rosa. La modelo explicó en un comunicado que su relación se había acabado tras tres años juntos y que, lamentablemente, no había sido "el mejor final para una historia tan bonita". Esas palabras no pasaron desapercibidas y comenzaron los rumores sobre si una infidelidad había sido el motivo principal de esa decisión.
Días después, el jinete se convertía en el protagonista de la historia tras fotografiarle con Hiba Abouk en la fiesta de la comunión de la nieta de El Turronero, lo que hizo pensar que la actriz podría estar relacionada con la ruptura de la pareja. Sin embargo, María José Suárez hacía unas declaraciones entonces explicando que a la vuelta del viaje que hicieron juntos con su hijo Elías, ella se enteró de "una noticia muy desagradable" por la que puso punto y final a su historia. Escassi explicó entonces que llevaba un tiempo distanciados y que en los últimos meses habían tenido idas y venidas en su relación. "Lo que quiero aclarar es que entre Hiba y yo no existe nada más que una amistad", aseguró también el jinete.
Este miércoles, SEMANA publicaba en la portada de su revista que el "desagradable motivo" del que hablaba María José Suárez fue "un correo electrónico de una mujer a la modelo" en el que, al parecer, explicaba con todo detalle una infidelidad por parte del jinete. En pleno revuelo sentimental, Álvaro Muñoz Escassi se ha refugiado en su hija Anna, que tiene 28 años. "Cuando lo que más quieres está contigo", escribía junto a una fotografía con su hija. "Tú también lo has estado sin tener que hacerlo", comentaba sobre el apoyo que está teniendo en ella.
La relación entre padre e hija tampoco ha sido fácil. En el año 2015, Escassi sorprendió a todos al posar en una revista con la joven - que hasta entonces era desconocida - y presentarla como su hija. Quince años antes de esta presentación pública, Álvaro se realizó las pruebas de paternidad y, junto a la madre de Anna, decidieron mantenerlo en secreto y convertirle a él en el padrino de la niña. "En realidad esta es una de las peores pesadillas que le puede pasar a alguien en la vida, pero en mi situación no es así porque desde que nací tuve cero relación con mi otro padre", explico Barrachina.
Desde que decidieron hacerlo público hemos podido comprobar que la relación entre ellos es muy cercana y están muy unidos. Los planes que comparten en familia o la relación que Anna Barrachina tiene con Lara Dibildos, expareja de su padre y madre de su hermano pequeño, son algunas pruebas de ello.