Ion Aramendi está a punto de ser padre de nuevo: el presentador se explaya sobre su mujer y sus hijos

Ion Aramendi se ha ganado a pulso ser uno de los rostros más queridos de la televisión nacional. El de San Sebastián estuvo más de un lustro recorriéndose las calles de nuestro país como reportero en 'Sálvame', abandonando este puesto en 2016 para estrenarse como presentador de formatos de todo tipo, siendo actualmente el maestro de ceremonias del debate de ‘Supervivientes’. Años de intachable carrera en los que ha sentido el apoyo de su familia, un círculo íntimo que incluye, entre otros miembros, a su mujer y sus hijos.

A María Amores, así se llama su compañera de vida, la conoció en Salamanca al inicio de su vida universitaria. “Yo repetí el primer curso y ella estaba un año por encima y siempre me pareció guapa y atractiva. Los dos trabajábamos como camareros en bares diferentes y una vez le pedí el teléfono, pero nunca me contestó”, recuerda esta semana en Lecturas. No obstante su relación empezó después, cuando el periodista regresó de Australia, donde estuvo viviendo una temporada para superar una historia de desamor.

“Me encontré con un amigo que había sido novio suyo y me dijo que ya no estaban, que María no tenía novio. Ella por Facebook me mandó un mensaje privado preguntándome si quería ser su amigo”, rememoraba al detalle. Una propuesta a la que respondió de inmediato: “Le dije que su amigo o algo más, y ahí empezamos”. Desde entonces no se han separado. Su esposa es, según sus declaraciones, la persona más inteligente que conoce y con la que más se divierte. “Nos gusta salir, cenar solos y nunca nos aburrimos, nos encanta hablar, somos cotillas”.

Amores le dio “lo más bonito” que tiene, sus dos hijos, Ion y Lucas. En 2013 llegó el mayor y en 2017 el pequeño, y desde entonces se han convertido en la debilidad del showman, que está a punto de repetir en la paternidad con una niña. “Ha sido una sorpresa total y absoluta, no era nada buscada. Nosotros habíamos bajado la guardia en ese sentido y estábamos convencidos de que no iba a pasar”, confesaba Ion que la familia se quedó en “shock” con la buena nueva.

Se prevé que julio sea el mes en el que cojan por primera vez en brazos a la pequeña. “Me apetece vivir la experiencia de una relación con una niña”, la pareja dio “un respingo de alegría” cuando el ginecólogo les dijo el sexo del bebé. “Sé que mis hijos dejarán de ser tan cariñosos y de darme los besos que me dan ahora, me verán como un enemigo, pero la niña espero que siempre me vea como un caballero andante y su príncipe azul”, está convencido de que será su ojito derecho.

Aramendi, que se considera un padre “divertido y juguetón” que busca que sus críos sean “gamberretes”, es consciente de que su inminente nacimiento traerá algo de celos a Lucas, su segundo retoño, ya que aún está “enmadrado”. “Es mimoso, cariñoso y tiene más mala leche que el mayor, que es más buenín y tiene un maravilloso mundo interior”, definía así a sus dos tesoros en el citado medio.