"Estoy de los nervios, familia virtual". Así de transparente ha sido Tamara Gorro en sus últimos stories de Instagram. Esta espontaneidad que la de Móstoles siempre ha llevado por bandera le ha hecho compartir con los suyos, con su legión de fans, el complicado momento que atraviesa. "Yo decía: 'no lo voy a contar, para qué'. Pero luego digo: 'por qué no, si son mi familia, y no es nada malo, al revés", contaba, haciéndoles partícipes de su indecisión. Hoy no es una fecha fácil para ella: en un mismo día, una celebración y un problema médico harán a la influencer pasar un rato agridulce. Y antes de generar preocupación, ha querido ser ella misma la encargada de contarlo.

"Estoy muy feliz y a la vez bastante angustiada", ha confesado hace apenas unas horas. Por un lado, hoy se cumplen tres años desde que su pequeño Antonio llegó al mundo. Un día "maravilloso" que, por cosas de la vida, esa que "tiene la costumbre de que te trae momentos preciosos y a la vez bastante jodidos", su hijo menor soplará las velas mientras su su abuela debe ser intervenida. "Operan a mi yaya. ¿Os acordáis de cuando estuvo malita? Pues quedó pendiente esta operación y mañana se la hacen", ha contado.

Su preocupación es previsible. "Sabéis cómo soy yo con mi familia y con mis yayos", ha planteado a sus seguidores, que ya son casi dos millones. "Si me hacen a mí lo mismo no pasaría nada, sería una operación muy sencilla. Pero como ella tiene problemas de salud, lo que puede conllevar es un poco más delicado", ha explicado. Con estas palabras, Tamara Gorro se refiere al bache que sufrió su yaya el pasado mes de junio y que le obligó a viajar en pleno estado de alarma de Valencia a Madrid para estar a su lado. Ahora, a pesar del evidente nerviosismo, su actitud es optimista: "Intento estar bien, pero bueno, va a salir todo perfecto, lo sé" ¡Mucho ánimo, compañera!

Su llegada fue inesperada. Después de estar a punto de tirar la toalla tras varios intentos de quedarse embarazada, Tamara Gorro lograba su sueño al poco de perder a uno de sus amigos del alma. Antonio, se llamaba, nombre que escogió para su segundo hijo en común con Ezequiel Garay. Junto a Shaila, el pequeño de la casa ya es un habitual en el Instagram de su madre. Lo que no sabíamos es que en el clan estuvieron a punto de ser uno más. ¿Sabías que la pareja paralizó el proceso de adopción de su tercer hijo una semana antes de conocerle? En este vídeo es la propia influencer la que nos cuenta el motivo por el que decidieron tomar esta drástica y dolorosa decisión.