Sara Jessica Parker lleva toda la vida dedicada a la interpretación, sin embargo, en alguna ocasión, ella ha confesado que sus momentos preferidos están relacionados con su familia, esa que ha formado junto al actor Matthew Broderick, con quien se casó por sorpresa en 1997. 

La pareja se conoció y se enamoró cuando Broderick trabajó como director de una obra de teatro para la compañía fundada por los hermanos de Sarah. Ella había dejado atrás una larga relación con Robert Downey Jr., cuyos problemas con las drogas marcaron el final de su relación, y un breve romance de 6 meses con John Kennedy, con el que había conocido lo que era ser el foco de todas las miradas. 

Su relación con Matthew llegó en el momento adecuado, la pareja se conoció, se enamoró y decidió sellar su amor sin avisar a nadie, los invitados pensaban que era una fiesta organizada por la pareja cuando descubrieron que era su boda. 

Juntos han formado un sólido matrimonio, que ha sabido superar algunos baches, como unas fotografías en las que se podía ver al actor junto a otra mujer, lo que supuso un duro revés. Con terapia y trabajo, consiguieron dejar atrás este momento. 

Se casaron cuando la actriz se encontraba en un momento inmejorable de su carrera, saboreando el éxito por Sexo en Nueva York, por eso decidieron esperar un poco antes de ampliar la familia. James nacía en 2002. 

Pasaron siete años hasta que nacieron las mellizas Marion y Tabitha (en junio de 2009), que llegaron a este mundo gracias a la gestación subrogada, una decisión que tomó el matrimonio tras mucho tiempo tratando de tener hijos de nuevo sin conseguirlo. Supuso toda una sorpresa cuando se supo y la actriz se vio en la necesidad de pedir respeto para la madre gestante, que se vio sometida a un gran escrutinio por parte de la opinión pública. 

La familia ha crecido en Nueva York, alejados de miradas y también de los focos de Hollywood por lo que los detalles que se conocen de los hijos de la pareja no son demasiados. 

Ahora James tiene ya 20 años y fue al cumplir los 18 cuando la actriz le dedicó unas bellas palabras. “Mi amado hijo, James Wilkie, en este día tienes 18 años. Me maravillo del paso de esos años, pero también del joven en el que te estás convirtiendo. Mi amor por ti es un dolor y un honor”, escribía la actriz.  

De vez en cuando comparte alguna fotografía de su primogénito en sus redes sociales, pero casi nunca se puede ver claramente al joven, con el que comparte grandes similitudes en las facciones. Poco a poco parece que se va animando a posar junto a sus padres y así se pudo ver en la alfombra roja de la película Sin malos rollos, en la que Matthew Broderick participa, donde mostraron su gran complicidad. 

Faltaron las mellizas, que ahora tienen ya 14 años, pero que también han acompañado a sus padres y hermano en alguna ocasión, sorprendiendo a los presentes y mostrando que ya están igual de altas que su madre. James, un apasionado de la música, ya vive fuera de casa y se encuentra estudiando en la Universidad de Brown.