Harry desnudo y otras siete pifias del príncipe juerguista
divinity.es
22/08/201212:46 h.1. Empecemos por las fotos por las que le va a caer una reprimenda de Buckingham Palace. Al parecer jugaba una partida de billar, apostó su desnudo y perdió. Un strip billiard que se le fue de las manos y que la web MTZ ha publicado. En una de las fotos la chica, de la que no s ienen datos, intenta protegerse del objetivo a su espalda y en la otra es el pelirrojo quien se da la vuelta y la persigue por la estancia.
2. Según informó la Daily News, este mismo fin de semana se encontró con Ryan Locht, ganador de cinco medallas en Londres (y 'orinador' confeso en las piscinas), quien celebraba su cumple. Dos piezas que hicieron puzzle, ya que acabaron apostando quién hacía un largo más rápido en la piscina donde estaban de fiesta.
3. El príncipe, tercero en la línea de sucesión, asistió en 2006 con unos amigos a un local de alterne en Londres, el Spearmint Rhino. Pidió un streaptess y se dejó fotografiar, con su hermano detrás, agarrando el pecho de una chica. Entonces mantenía una relación con Chelsy Davy. The Sun tituló su portada con el jugo de palabras 'Dirty Harry' ('Harry el sucio').
4. No por más infantil dejó de chocar a la sociedad inglesa que Harry y su ex novia desde 2010, Chelsy Davy, enviaran a sus amigos postal navideña en la que aparecen caracterizados como dos elfos bailongos.
5. En 2005 sucedió otro de sus escándalos más sonados: fue fotografiado disfrazado de nazi en una fiesta. Las portadas fueron suyas durante semanas. Clarence House, la residencia oficial de su padre, emitió una nota para pedir disculpas.
6. Otra metedura de pata que puede traerle consecuencias internacionales fue un vídeo en el que utiliza términos considerados despectivos para la comunidad musulmana y, sobre todo, para los paquistaníes. Les llamaba raghead, ‘cabeza de turbante’. El vídeo fue filmado por el propio Enrique cuando estudiaba la carrera militar. Grupos extremistas le amenazaron de muerte.
7. La caza fue otro frente abierto. Fue interrogado por la policía tras la muerte a tiros de dos aguiluchos pálidos (Circus cyaneusv), una especie protegida, en una finca de la Reina en el norte de Inglaterra. Las penas son 13.300 euros y seis meses de cárcel.