Álvaro Morata y Alice Campello se conocieron en uno de los momentos más complicados de sus vidas, sobre todo, para el futbolista, que estaba pasando una mala racha personal y deportiva; sufría una lesión que arrastraba en silencio desde hacía meses, no marcaba goles y su familia pasaba por distintas dificultades. El joven se había mudado a Italia, país por el que sentía predilección, pero tuvo que dejar atrás todo lo que quería y, también, a la que por entonces era su pareja, María Pombo.
Al poco tiempo de aterrizar en la ciudad italiana de Turín, Álvaro conoció a Alice, hija de un importante empresario y que estaba dando sus primeros pasos en el mundo de las redes sociales y de la moda. Parece que cuando sus vidas se cruzaron, Álvaro inició su racha de buena suerte. Hasta ese momento lo había intentado todo, pero nada era suficiente para hacer que su carrera como futbolista volviera a despegar.
Alice, dos años menor que él, se convirtió entonces en una pieza fundamental para que Álvaro pudiese recuperar a ese equilibrio. Así, desde hace más de cuatro años sus caminos no han vuelto a separarse. Ahora, ambos disfrutan de su vida familiar junto a sus tres pequeños, Alessandro, Leonardo y Edoardo. En Divinity, te contamos cómo son los tres pequeños y cómo está siendo su nueva vida en Italia.
Morata lleva años siendo uno de los jugadores mejor valorados de nuestro país. Así, el futbolista ha pasado por distintas categorías del Real Madrid, llegando hasta el primer equipo y también ha jugado en el Atlético de Madrid. Antes de comenzar su historia de amor con Alice, Álvaro tuvo varios romances sonados. Cuando eran muy jóvenes, Morata conoció a Carla Barber, que por aquel entonces era una joven modelo que estudiaba Medicina y que ya se había presentado a algún que otro certamen de belleza. Más tarde, viviría una de las relaciones que más le ha marcado: su noviazgo con María Pombo.
Fue en el año 2010 cuando el futbolista se marchó a jugar a la ciudad italiana de Turín. En aquel momento, estaba con María Pombo, una joven totalmente desconocida para la opinión pública, pero que se movía en los mismos ambientes que el futbolista. María estudiaba Protocolo y Turismo y ambos se dedicaban románticas fotos a través de sus respectivas redes sociales. Eso sí, parece ser que los kilómetros pudieron con la relación entre la estudiante y el futbolista y, por eso, decidieron poner punto y final. Aunque eso sí, pudimos ser testigos de varias idas y venidas.
Ahora, María evita hablar de su noviazgo con Álvaro Morata y, tan solo, ha dejado caer, en más de una ocasión, que lo pasó verdaderamente mal y le rompieron el corazón. Lo mismo le sucedió a Morata, quien atravesó, a finales de ese mismo año, una de las etapas más complicadas de su vida. El joven sufría pubalgia, una de las molestias más desagradables que pueden existir, y con la que no podía ni correr o marcar un gol. Así, Álvaro pasó los momentos más difíciles lejos de su familia y de todo aquel en quien podía apoyarse. Pero todo cambió cuando conoció a la mujer que le cambiaría la vida: Alice Campello. Álvaro, que ya le seguía la pista a través de su perfil de Instagram, decidió mandar un mensaje a la influencer. Así comenzó su historia de amor.
Ella tardó un tiempo en responder, aunque no tardaron en quedar para verse en Milán. Por aquel entonces, Alice estaba estudiando Marketing y, también, había creado su propia línea de bolsos. Un año después de conocerse, Álvaro no lo dudó y le pidió matrimonio. Ambos pasaron por el altar el 17 de junio de 2017 en una de las iglesias más importantes de Venecia.
Unos meses más tarde de la boda, anunciaron que estaban esperando mellizos. Así, los pequeños Alessandro y Leonardo nacieron en el verano de 2018.
Alice y Álvaro, aunque especialmente la influencer, son muy activos en sus perfiles de Instagram. Así, podemos ser testigos de las trastadas de sus dos hijos pequeños y de cómo estos ya son grandes aficionados al fútbol. Además, Alice está totalmente volcada en su faceta como madre y no duda en compartir el día con sus dos retoños.
La pareja nunca escondió las ganas de ampliar la familia y así lo confirmaron hace unos meses cuando anunciaron que estaban esperando su tercer hijo. El pequeño Edoardo nació el 29 de septiembre de este mismo año.
Ahora, la familia ha emprendido una nueva vida en la ciudad de Turín, donde Morata ha vuelto a jugar. Lo cierto es que es una decisión que no fue muy difícil de tomar porque, aunque no sea la ciudad natal del deportista, se siente muy arraigado a la cultura italiana. Además, a Alice también le apetecía volver unos años a casa y estar más cerca de su familia.