Si los primeros ministros y presidentes de Gobierno se están esforzando para demostrar al ciudadano de a pie que se están modernizando y ya son internautas, la Casa Real británica no iba a ser menos. La boda de Guillermo y Kate.
El despliegue multimedia empieza con un canal en YouTube. Allí se podrá seguir en directo todo el recorrido de los novios y la ceremonia. De momento, han subido una invitación oficial al evento y varias entrevistas a diferentes participantes. Además, cualquiera que quiera felicitar a la pareja puede cargar su vídeo en esta misma plataforma.
Tienen también cuenta en Twitter, donde van actualizando con cada material nuevo que ponen a disposición del público. En el perfil de Facebook de The British Monarchy enlazan prácticamente lo mismo, pero además crean álbumes de fotos. También publican imágenes de la familia real y harán lo propio con las de la boda en su cuenta de Flickr.
Además, para quienes quieran hacer un regalo a los novios, han activado una página web en la que se recogen cinco causas benéficas elegidas por Guillermo y Kate a modo de lista de bodas. Así, en vez de la clásica selección de productos de varias tiendas o la lluvia de sobres, el dinero de quienes quieran contribuir con un presente irá a varios fondos benéficos.
Según se vaya acercando la fecha del enlace, saldrán a la venta algunas aplicaciones para móviles para seguir minuto a minuto lo que ocurre en abadía de Westminster. Y después de la boda, se podrá adquirir en iTunes la banda sonora del evento.
Parece pues que este está siendo un bodorrio 2.0 en toda regla: participativo, interactivo y online. Para que luego digan que las monarquías son cosa del pasado… Los más carcas, pueden visitar la clásica página web que han montado para la ocasión, con una navegación algo más sencilla que no requiere estar inscrito en una red social.