Santiago Segura es uno de los cómicos más reconocidos de nuestro país. A pesar de ser muy extrovertido frente a la cámara, el ‘amiguete’ intenta siempre dejar su vida personal lejos de los focos. Aún así, sí que es cierto que, en los últimos meses, sus dos hijas, Calma y Sirena, han aparecido más en la pequeña y, sobre todo, en la gran pantalla, donde se sienten muy cómodas y están comenzando con su carrera profesional. Además, la mayor también dedica mucho tiempo a sus redes sociales, donde sube alguna de sus covers.
Por su parte, la pequeña es la que más aparece en el Instagram de su padre, donde Santiago sube cómicos vídeos junto a su hija. Así, sus dos retoños han ido acaparando un poco de ese protagonismo que el actor lleva cosechando desde hace años. Eso sí, la mujer de Santiago Segura siempre se ha querido mantener al margen y, por ahora, sabemos pocas cosas de ella. Pero, ¿cómo son Calma y Sirena?
Santiago Segura comenzó su carrera en el mundo del espectáculo cuando era muy joven y con tan solo ocho años rodó su primera película con una pequeña cámara. Eso sí, la fama no le llegó hasta los años 90 cuando se hizo con un Premio Goya al mejor actor revelación. Por aquel entonces, Santiago comenzaba su relación con María Amaro, una maquilladora profesional. A ella la conoció durante el rodaje de Torrente en 1998. Diez años después nació la primera hija de la pareja a la que llamaron Calma y, en el 2013, nació la pequeña Sirena.
Santiago se ha confesado como una persona de gustos sencillos a la que le gusta pasar tiempo con sus dos hijos y montar en bicicleta. Además, siempre ha animado a sus hijas que se dediquen al mundo de la interpretación y, por eso, ambas se lanzaron y han actuado, junto a su padre, en el largometraje Padre no hay más que uno. Además, Santiago ha confesado que, cuando escribía el guion de la película, solamente podía pensar en Calma y Sirena, que también fueron su inspiración.
"La mayor solo quiere trabajar con su padre y mi hija pequeña está muy graciosa, está mal que yo lo diga, pero es que lo hace muy bien", contó Segura, muy orgulloso. Eso sí, sus hijas pasaron el casting como otras niñas, ya que su padre quería estar seguro de lo que estaba haciendo y que valían para el papel. Además, según ha confesado en más de una entrevista, él está completamente enamorado de sus hijas. “Se me cae la baba cuando las veo”, ha comentado. Esta devoción se puede observar en sus redes sociales, donde el actor comparte una infinidad de imágenes y vídeos junto a sus dos pequeñas.
Además, Calma, que ya está comenzando con su vida adolescente, también es muy activa en su perfil de Instagram, donde sube vídeos tocando el ukelele. Uno de los mejores regalos que le ha hecho su padre. También, a Santiago Segura le han preguntado, en más de una ocasión, el porqué de los nombres de Calma y Segura. “Los nombres son por mi obsesión con que no me recordaran a ninguna compañera de clase, a ninguna actriz, a ninguna exnovia…”, confesó el actor. “Ahora, digo Calma y es mi hija”, añadió.
Eso sí, para su hija Sirena tenía en mente otro nombre. “Aunque reconozco que a Sirena no me dejaron ponerle otro nombre que se me había ocurrido, que era Salsa”, explicó. “Y yo creo que hubiera acertado totalmente, porque Calma es calma y Salsa hubiera sido salsa, porque es un demonio, la clásica niña gamberra”, contó a un conocido medio gallego. Así, Santiago está muy unido a sus dos hijas y, además, ahora que trabajan juntos pueden pasar más tiempo juntos. Esto ha hecho que su relación sea aún más estrecha y que, también, sus dos pequeñas conozcan el trabajo de su padre desde dentro.
Eso sí, Santiago ha dejado claro, en más de una ocasión, que el apoyará a sus hijas en cualquier camino que decidan tomar en su vida. Por eso, está muy concienciado con que conozcan lo que realmente les gusta y lo que no. Aún así, Santiago todavía apuesta por dejar su vida privada lo más alejada de los focos posible.