Con la gala del MET, que se celebra cada año el primer lunes de mayo, se inaugura cada año la exposición de moda que acogerá el Costume Institute del Museo. Tras dos ediciones en las que el evento ha tenido que ser suspendido, la gala se celebrará de manera excepcional el próximo día 13 de septiembre.
Al evento de 2021 le seguirá otro en mayo de 2022, ya en su fecha habitual, y ambos forman parte de sendas exhibiciones que tienen como tema central la moda estadounidense.
La primera muestra bajo el título 'In America: A Lexicon of Fashion' (En Estados Unidos: un léxico de la moda), destinada a celebrar el 75º aniversario del Costume Institute, se ha planteado como una casa estadounidense destinada a reflejar las costumbres de sus habitantes ficticios y está pensada para exponer piezas de los siglos XIX y XX.
Andrew Bolton, comisario de la Muestra, comunicaba el dress code de la noche con solo dos palabras: Independencia de Estados Unidos. Un código de vestimenta que deben interpretar los invitados y los diseñadores elegidos y que puede oscilar en varias direcciones.
Los más literales pueden remontarse a la moda que imperaba en la época de la Guerra de la Independencia de Estados Unidos o a prendas estampadas de las barras y estrellas de su bandera.
Pero no es la única opción: quienes quieran hacer un homenaje a los pioneros del estilo americano, elegirán modelos vintage de diseñadores como Halston u Oscar de la Renta. Los más libres pueden apostar por el activismo con temas de actualidad como la diversidad, la inmigración, la inclusión o la sostenibilidad.
A pesar de la exigencia de un dress code específico, éste no siempre es bien entendido por los asistentes y el resultado es que, generalmente, los looks de la gala del MET tienen muy poca cohesión entre ellos.
Lo cierto es que se espera una avalancha de diseño americano con nombres como Tom Ford, Marc Jacobs, Zac Posen o Prabal Gurung, aunque también habrá un lugar esa noche para diseñadores de vanguardia como Sterlig Ruby, Miguel Adrover o Pyer Moss. Todos presentes en la exposición que se inaugura.
A estas alturas el estilismo de los invitados es uno de los grandes secretos que guardan los famosos, sus estilistas y los diseñadores elegidos, pero podemos echar mano de la imaginación y proponer varios looks con los que acertar con la temática de la noche.
Para hacer un guiño a las barras y estrellas, algún invitado podría optar por un diseño del mallorquín Miguel Adrover con su personal interpretación de la bandera americana.
Un vestido de tul de Christian Siriano, que además de a Laverne Cox y Billy Porter en los Oscar, ha vestido a grandes estrellas como Celine Dion, Ariana Grande o Lady Gaga.
Quien se decida por un modelo de Thom Browne busca romper con todas las reglas existentes, ya se trate de Katy Perry o de Willow Smith.
Vestir a Viola Davis ha sido uno de sus grandes logros, pero la firma camerunense Lavie by CK (Claude Kamenis) y en esta gala sería una apuesta por la diversidad y la integración.
Más que una firma de ropa, Puppets and Puppets fusiona en su ropa las bellas artes y la moda, creando construcciones escultóricas sin perder de vista la utilidad y la comodidad.
La firma creada por Sterling Ruby también tiene un vínculo indiscutible con otras artes plásticas. Tendiendo en cuenta sel discurso político y social de la colección de alta costura que desfiló en París, es posible que alguna de sus prendas se cuele entre las elegidas.
La firma Pyer Moss, fundada por Kerby Jean-Raymond, ha hecho historia por ser la primera firma dirigida por un afroamericano que desfila en la alta costura. Por si alguien está buscando un look con trasfondo social.
Para quienes se inclinen por un atuendo vintage, la elección de un nombre como el de Rudy Gernreich tiene también una implicación social. No sólo inventó el monokini, el bikini tanga y la ropa unisex, sino que fue miembro fundador de la organización de derechos de los homosexuales Mattachine Society.
Halston es otro de los grandes candidatos a vestir a las más nostálgicas de la noche. Su capacidad para fusionar la elegancia europea y el minimalismo norteamericano lo convirtieron en el favorito de mujeres como Angelica Huston, Pat Cleveland o Liza Minelli.