Si formas parte de los fans de David Bustamante, quizá sepas que el cantante está obsesionado con el número 3. Lo comentó en una reciente entrevista con motivo de la salida al mercado de su último álbum, ‘Inédito’ en La Vanguardia. En ella, explicaba que, antes de un concierto, se santigua tres veces, salta tres veces o sube el volumen de su televisor siempre en múltiplos de tres. Esa manía reconocida por el cántabro tiene su simbología particular. ¿Sabes qué representa el 3 en numerología?

David es un claro número 3: nació el 25 de marzo de 1982, es decir: 2+5+3+1+9+8+2=30, y 3+0=3. No nos extraña que adore este número, que es el que rige su vida.

En numerología, el 3 se asocia con la creatividad y la comunicación, pero también con el autoconocimiento.

Las personas que se rigen por este número suelen ser intuitivas, ingeniosas y también con un gran don de gentes. Son de esas personas que hacen comunidad, a las que les gusta embarcarse en grandes proyectos. También son muy seguras de sí mismas y muy activas (a veces incluso demasiado). Les cuesta estar quietas y, en consecuencia, no son muy capaces de descansar.

Si eres un número 3 o conoces a alguno, la numerología dice de estas personas que son inquietas por naturaleza, que siempre suelen estar implicadas en distintos proyectos a la vez. Esto puede ser bueno y malo según a qué se dedique la persona regida por el 3, ya que, al no ser capaces de concentrarse en una sola tarea, tienden a la dispersión y a malgastar energía.

Si nos atenemos a la personalidad del 3, la numerología dice de ellos que son esas personas que animan cualquier reunión: son alegres, joviales y no pueden parar de hablar. Gozan de una alta estima y popularidad entre los suyos y son honestos y confiables, pero también suelen presumir demasiado de sus logros, su principal defecto.

Su optimismo natural les saca de más de un apuro y los ayuda a enfrentar los problemas con mejor talante. 

El 3 es, por otra parte, la perfección. Como te contaremos ahora, es un número presente en multitud de aspectos. La ciencia, en concreto las matemáticas, tienen su propia rama con el número 3, la trigonometría, que no es sino la medición de los triángulos (figuras con tres lados, tres vértices y tres ángulos). Percibimos tres dimensiones, hay tres leyes de Newton… El número pi, que representa la relación entre una circunferencia y su diámetro, es el 3 (con decimales, sí, pero el 3).

El 3 es un número lleno de significados. Está profundamente arraigado en la sociedad occidental. En el plano religioso tenemos la Santísima Trinidad, sobradamente conocida. Tres veces negó Pedro a Jesús, que murió a los treinta y tres años. 

Pero no solo sucede en la religión católica: los hinduistas tienen en el 3 la tríada de dioses principales, Brahma, Vishnu y Shiva. El patrón del 3 aparece constantemente en diferentes creencias. También es la representación del equilibrio y del movimiento continuo: cuerpo, mente y espíritu son otra celebración de la perfección del 3. 

Como le ocurre a David, la búsqueda del número 3 en la vida es la búsqueda de la armonía, del equilibrio. La cultura celta lo consideraba su número más sagrado precisamente por eso, porque representa la perfección y la estabilidad.

El 3 también simboliza el principio y el fin, la evolución constante y el aprendizaje permanente. Es la representación numérica de la vida en continuo flujo.

¿Has pensado de cuántas maneras aparece el número 3? Piensa en el cuento de ‘Los tres cerditos’, en los tres deseos que se le piden al genio de la lámpara, en los tres mosqueteros o hasta los tres tristes tigres tragando trigo en un trigal del famoso trabalenguas. Incluso en el trío de premios olímpicos: medalla de oro, de plata y de bronce. Con tantísimas referencias, ¡ahora entendemos un poco mejor por qué a David Bustamante le llama tanto la atención este número!

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