Burak Özcivit ha vivido momentos de gran tensión en Pakistán. El actor protagonista de 'Kara Sevda', que ha viajado hasta el país para promocionar un perfume del que es imagen, ha acudido a un evento organizado en un centro comercial donde se agolparon miles de fans. La presencia de seguidores ha superado todas las previsiones de la organización y el actor se ha encontrado en medio de una marabunta de gente que quería un autógrafo, una foto o simplemente tocar a su ídolo.
La visita de Özcivit a Karachi ha desatado la locura entre los millones de fans que tiene el en el país. Todos querían verle de cerca, pero la presencia de tal cantidad de gente ha desatado el pánico de las autoridades, que se han visto obligadas a intervenir para evitar que la situación se desbordara y se produjeran heridos.
Gritos, empujones, cámaras de fotos... Burak Özcivit ha llegado al evento entre el griterío ensordecedor de cientos de fans que, nerviosos, han estado horas esperando su aparición en el centro comercial. Nadie quería perder esta oportunidad única para tener una imagen de su actor favorito. Y ha sido verle aparecer y desatarse la locura. Los empujones han hecho temer lo peor y ante el miedo a que se produjera una avalancha, la policía del país y el personal de seguridad se han visto obligado a intervenir. Entre todos han escoltado al actor por el centro comercial.
La policía ha rodeado al actor consiguiendo así crear un perímetro de seguridad en torno a él y mientras algunos lo han escoltado, otros han hecho un pasillo para que pudiera escapar de la multitud sin sufrir daño alguno. Entre todos le han abierto paso hacia la tienda donde estaba programado el evento. Su rápida respuesta ha evitado que se haya producido un incidente de graves consecuencias.
La tensión ha sido máxima, pero el actor ha logrado mantener la calma ante la situación. Ya en el interior del local, donde también había un número importante de seguidores y en un intento por tranquilizarlos, se ha subido a una mesa para pedir calma a los cientos de fans que se han agolpado tanto en el interior como en las puertas de la tienda para poder acercarse a él.
Pese a la complicada situación que ha vivido, el actor se ha mantenido tranquilo y no ha temido por su integridad física. Decidido a cumplir el acuerdo con la marca a la que representa, y que según algunos medios le ha pagado diez millones de liras turcas (casi 350.000 euros) ha seguido adelante con el evento pese a todas las dificultades con las que se ha encontrado.