Poco se habla de una de las opciones para viajar más ideales del verano: el barco. No hablamos de los viajes en grandes cruceros que permiten recorrer varios países y sus costas en poco tiempo, sino de descubrir lugares increíbles. A muchos de ellos solo se puede acceder en barco, lo que supone la motivación necesaria para lanzarse a una embarcación que nos permita llegar a donde pocos lo hacen. El Mediterráneo ofrece rincones espectaculares que puedes disfrutar alquilando una embarcación para ti y tus acompañantes o sumándote a muchas de las excursiones que se ofertan en puntos claves de la costa. Y si no sabes por dónde empezar, te sugerimos destinos perfectos para ir en barco este verano. 

La verdad es que cualquiera de las Islas Baleares sería perfecta para recorrer en barco, pero merece la pena destacar el litoral de Menorca por su gran atractivo. Y, sobre todo, porque está repleta de pequeñas calas a las que no se puede llegar a pie, solo en barco. Sin duda un aliciente enorme para navegar y descubrir rincones como Cala Pregonda o Es Talaier, disfrutando del sol y el mar más relajante.

Almería esconde un tesoro único de la naturaleza. Una región semidesértica que desemboca en una aguas cristalinas realmente impactantes. El Parque Natural de Cabo de Gata es un paraíso a recorrer en barco y disfrutar de sus impresionantes playas, como los Genoveses, la Playa de los Muertos, Mónsul o la Cala de los Toros. Te aseguramos que, una vez descubiertas, querrás volver a esas playas una y otra vez, además de disfrutar de localidades con vida animada como Mojácar. 

La isla de Cerdeña es uno de los mejores destinos del Mediterráneo para el verano, y no habrá rincón que no te enamore. Además, las posibilidades que ofrece viajar en barco por el litoral de la isla merecen tanto la pena que hay que aprovecharlas. Como no te va a faltar la oferta de embarcaciones y destinos si aterrizas en Cerdeña, queremos recomendarte una excursión a Cala Luna. El nombre le viene de su forma en luna creciente, y sus atractivos son varios: arena fina y dorada, aguas de color turquesa, cuevas e imponentes acantilados. Aunque se puede llegar desde tierra firma, acceder a ella en barco es una experiencia que merece la pena.  

Recorrer la costa croata en barco es algo que merece la pena hacer al menos una vez en la vida. No hay una sola de sus islas que no vaya a sorprenderte, pero si tuvieras que elegir una sola cosa que hacer, no dudes en adentrarte en barco en la Cueva Azul. Existen numerosas cuevas marinas por todo el Mediterráneo, pero esta, en la Isla de Biševo se considera la más espectacular. Solo se puede llegar en barco para apreciar el indescriptible espectáculo de luces cuando el sol alcanza la cueva desde diferentes ángulos.  

No podía faltar Grecia en este listado, y como resulta imposible resumir todas las opciones que tienes para recorrer en barco, nos hemos quedado con la Isla de Skiathos y su playa de Lalaria. En realidad en esta isla puedes acceder en barco a numerosas playas y bahías aisladas, pero Lalaria merece una mención aparte, desde la puerta de piedra que te recibe, hasta sus aguas y sus cuevas marinas. Cuenta la leyenda, que quien nada en sus aguas recibe el don de la eterna juventud, y algo parecido debe ocurrir al llegar a un lugar así.