Isabelle Junot, en exclusiva: “He aprendido a estar en paz conmigo misma, tanto con la comida como con mi cuerpo”

Isabelle Junot vive uno de sus mejores momentos. Inmersa en su proyecto 'Isa Healthy Life' como coach de alimentación intuitiva -no hay duda de que la cocina se convirtió en una de sus pasiones desde que se puso al frente de los fogones televisivos-, actualmente también disfruta de su reciente maternidad con Philippa, llamada así en honor a su padre, Philippe Junot. A pesar de formar parte de la alta sociedad de nuestro país, la marquesa de Cubas nos cuenta que es de gustos sencillos y que para ella el plan perfecto es pasar un día con su marido y su hija, tranquilos, disfrutando de su compañía y -por qué no- probando nuevos restaurantes en la capital.

El bienestar, tanto físico como emocional, es otro de sus objetivos a corto plazo, y aunque estar expuesta en las redes sociales pueda suponer una presión por lucir siempre perfecta, en nuestra charla confiesa que es un tema que no le preocupa y que prefiere hacer las cosas con tiempo, disfrutar de cada momento con su pequeña y exigirse lo que le pida el cuerpo en cada momento. Una cita en la que también hablamos de moda, fitness, cine y alguna que otra confidencia.

Hablemos de nutrición, ¿qué puedes contarnos de tu proyecto ‘Isa Healthy Life’? 

‘Isa Healthy Life’ es un proyecto que lleva activo desde el confinamiento. Lo he hecho con mucho cariño y me divierte mucho, pero requiere mucho trabajo. Lo cree para ayudar a chicas a que dejaran de tener una relación negativa tanto con la comida como con su cuerpo y para que aprendan a comer de forma sana, pero sin obsesionarse, y entender que tener una relación sana con la comida significa poder comer un poco de todo. Aprender a estar en paz con tus alimentos prohibidos, no estar luchando contra la manera en la que comes, no empezar una dieta cada lunes, o vivir comiendo y después sintiendo culpa, etc. 

¿Cuál es el próximo proyecto que tienes entre manos?

Como próximo proyecto diría que quiero seguir creciendo, seguir creando cursos y traducirlo todo al español.

Actualmente has sido imagen de la exposición ’10 emociones 10 rosas’ con la que Solán de Cabras busca dar visibilidad a la importancia del bienestar psicológico para pacientes de cáncer y sus familiares. En tu caso, ¿crees que una buena dieta está relacionada con estar bien a nivel mental?

Por supuesto, pienso que una buena dieta está relacionada con estar bien a nivel mental, 100%. Por eso hago lo que hago y es aprender a estar en paz tanto con la comida como con tu cuerpo y contigo misma, porque cuando vives sintiéndote mal o dándote atracones o comiendo emocionalmente sin parar, eso te sienta mal a nivel físico y también a nivel mental. 

¿Cómo crees que pueden cambiar ese tipo de ‘relación tóxica’ las personas que la sufren?

Lo primero para poder cambiar todo eso consiste en ‘educar’ tus pensamientos y tu mindset sobre la comida para poder cambiar tus comportamientos con ella y tener el control, no sentir que la comida te controla a ti. Entonces, sí, creo que está muy relacionado con estar bien a nivel mental también. Lo que no quiero decir es que, cuando te comes un postre, eso te machaque a nivel mental, no. Yo como postres y como de todo, sé cómo nutrirme en mi día a día y sé cómo hacer que todos los alimentos tengan un espacio en mi dieta. 

Cambiando de tema, ¿te importa mucho lo que digan de ti en redes sociales? ¿Sueles leer los comentarios de tus seguidores?

Los comentarios de mis seguidores sí los leo y suelen ser muy positivos. Yo, afortunadamente, no tengo que experimentar mucha negatividad; si no, hasta cierto punto. Obviamente, me importa lo que dicen, pero me lo tomo con filosofía. Leer cualquier comentario que sea negativo afecta y más si es sobre ti, pero no caigo en eso. Cuando es algo fuera de mi propio perfil, no me molesto en leer los comentarios o, si los leo, lo hago sabiendo lo que son, no dejo que me afecten, entiendo que es gente que no me conocerá en realidad y los prejuicios son prejuicios y ya está, pero lo que tengo claro es que no dejo que me afecte. 

Nueva York, Madrid… pero también los países nórdicos. Has vivido en medio mundo. A nivel moda, ¿con qué país te quedas?

Creo que me quedo con Nueva York, que es uno de los centros donde se junta la moda de diferentes países. Aunque también me gusta la moda nórdica, en el sentido más moderno, que es como más minimalista. Porque, por una parte, me encanta todo lo que son colores y estampados, pero por otra, también tengo ese lado más limpio y depende del día o de cómo me sienta.

¿Cuál crees que es la mayor diferencia de estilo entre las madrileñas y las neoyorkinas?

Hay de todo, obviamente, pero siento que, si estás en Nueva York y ves una madrileña, la reconoces de lejos; sin embargo, en Nueva York, hay más diversidad porque hay de todo. En Nueva York es algo más ecléctico y en Madrid algo más clásico o básico, pero no en un sentido negativo.

Tu look perfecto desde que eres mamá es…

Para mí, lo más importante a la hora de elegir un look es sentirme cómoda, pero eso también lo era antes de ser madre. O sea, no me pongo un pantalón que no me cabe porque tengo que entrar en ese pantalón, sino que me compro una talla más grande. Entonces, más que estilo, lo que busco es confort, pero que vaya con mi personalidad y dependiendo del momento. En el día a día prefiero un vaquero, una bota, una zapatilla… nada muy extravagante.

¿Has sentido presión mediática o en redes por recuperarte después del embarazo?

No, yo no tengo ni prisa ni caigo en ninguna presión. A lo mejor, sí que noto que se comenta quizá que me he recuperado rápido y me preguntan qué he hecho y la verdad es que absolutamente nada. Evidentemente, no tengo el mismo cuerpo que antes; si vuelve, bien y, si no, da igual. Me lo tomo con calma y dejando que el cuerpo se recupere, pero no tengo presión. 

El deporte es otro de tus pilares. ¿Qué rutina sigues?

Sí, el deporte es uno de mis pilares. Ahora, con Philippa, depende de si tengo tiempo o no, porque estoy con mucho trabajo también, pero todos los días intento mover mi cuerpo aunque sea andando, yendo a los recados… Me mantengo activa sí o sí. Ahora estoy intentando hacer más Pilates y entrenar esta disciplina al menos una vez a la semana. También me gusta estirar y hacer pesas, pero siempre escuchando antes a mi cuerpo; por ejemplo, hoy quería ir a entrenar, pero dormí peor y, entonces, me he cogido el día de descanso. Pienso que el deporte debe ser un alivio y no suponer más estrés para el cuerpo. 

Tu lugar favorito de vacaciones

Cualquier playa bonita con poca gente, en concreto una isla en Kenia

Tu plan perfecto de fin de semana

Estar con mi hija y con mi marido, salir a comer a un sitio que nos guste o probar alguno nuevo, pero estar los tres.

Tu mayor miedo

Vivir con un mayor miedo. Obviamente tengo miedos, pero me niego a vivir con algo que me cohíba.

Película y libro favoritos

Uf, películas tengo muchas, nunca sé qué contestar a esta pregunta, voy a tener que hacer una lista (ríe). En cuanto a libros, cada libro que leo y me gusta se convierte en mi libro favorito; el último ha sido ‘Las Siete Hermanas’ de Lucinda Riley.

La actriz cuya filmografía no te cansas de ver 

Meryl Streep.

El capricho más caro que te has dado

El conjunto de cursos. Siempre me gusta comprar cursos, coaching y ese tipo de cosas en vez de cosas materiales. No me doy caprichos muy caros aparte de todo lo que es formarme.

Un sueño por cumplir

Tengo varios: seguir con ‘Isa Healthy Life’, trabajar con marcas que me gusten… Y, en un mundo paralelo, me encantaría vivir en el campo y tener mi propia huerta, hacer una vida más slow life y tener calidad de vida.

¿Cuál era tu trabajo deseado cuando eras pequeña? 

Veterinaria, porque me encantan los animalitos y, si no, actriz.

Qué le dirías a la Isabelle de tu adolescencia

Cree al 100% en todo lo que te propongas hacer y hazlo.

El último momento en el que hayas pensado: ‘soy feliz’

Por muy cursi que suene, cada noche y cada mañana. De verdad que es algo que pienso y me digo a mí misma y forma parte de mi rutina de bienestar, el acto de ser agradecida y saberlo.