Dani Martín está inmerso en la promoción de su último disco en solitario 'El último día de nuestras vidas', que sale este 29 de noviembre al mercado. Su regreso a la música se debe a que está atravesando una de sus mejores épocas a nivel físico y mental, después de una época alejado del foco público. El álbum viene acompañado de la gira '25 p*t*s años', en la que hará un repaso por su carrera. Y es que mucho ha llovido desde que el madrileño fuera el líder de 'El canto del loco', una de las bandas más populares de los 2000. Su aspecto también ha evolucionado, de hecho después de años apartado de los medios de comunicación, el año pasado cuando apareció en un vídeo de apoyo al luchador Ilia Topuria, acompañado de otros rostros populares como Rafa Nadal o Álvaro Morata, sus fans se sorprendieron al notarlo considerablemente cambiado.

En un post en su Instagram, el de San Sebastián de los Reyes aparecía visiblemente más delgado, se había dejado el pelo largo y se lo había teñido de rubio. Todo ello desató las especulaciones y los rumores achacando el cambio a todo tipo de circunstancias sin confirmar ninguna de ellas. Tales fueron las habladurías que hasta el propio cantante, desde su retiro, tuvo que salir al paso: "He adelgazado porque me estoy cuidando, no estoy mal ni tengo depresión ni nada de eso. De hecho, tengo la piel mejor, duermo mejor, y todo mejor". Y es que él mismo explicó antes de su retirada de la escena pública lo siguiente: "A veces estoy delgado y otras hinchado. Emocionalmente no soy una persona muy equilibrada, sufro mucho (...). Nos vemos en unos años, sed felices. Hasta luego, hasta siempre, hasta cuando surja de verdad".

Y hubo un punto de inflexión, durante este retiro, que hizo que el cantante se tomara en serio su salud. En una entrevista que concedió a 'El País' cuenta que durante el verano de 2023 se pesó y la báscula marcó 94,7 kilos. La cifra le hizo reflexionar ya que como mencionaba en aquella charla "nunca había llegado a los 90 [kilos]". Entonces explicó también que decidió tomar cartas en el asunto. "Me encerré en casa, dejé de beber alcohol y me puse a comer sano, mucho, una dieta antiinflamatoria". Estos cambios le llevaron a perder 31 kilos. Pero su método también tuvo consecuencias positivas en su estado de ánimo: "Porque el estar gordito de alegría es maravilloso, pero el estar saludable por una alimentación maravillosa es increíble", reveló en sus redes sociales.

Reconoce también que apartar el alcohol de su dieta ha sido una gran base para su transformación. "Hay a gente que le sienta mejor el alcohol y hay a gente que le sienta peor; a mí no me sienta del todo bien. Y ahora soy mucho más feliz", ha explicado. Este cambio también ha provocado que ahora disfrute más cuando se sube al escenario.

Según explican desde la clínica Teknon la dieta antiinflamatoria es un enfoque dietético diseñado para reducir la inflamación crónica en el cuerpo, un proceso asociado con el desarrollo y progresión de diversas enfermedades, incluidas las enfermedades cardiovasculares, la diabetes y ciertas afecciones autoinmunes. Aunque no existen pautas concretas para realizar esta dieta sí que los expertos se ponen de acuerdo en incluir varios ingredientes como frutas y verduras, pescado graso y cereales integrales.

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