Las actividades extraescolares pueden aportar muchos beneficios a los niños, y dentro de las deportivas, las artes marciales cada vez son más demandadas. En los últimos años se han puesto de moda las clases de taekwondo, un deporte similar al karate, pero de origen coreano, en el que se aprende a combatir con puños y patadas. Es muy popular en todo el mundo, aunque puede que te parezca un poco agresivo de entrada. Pero lo cierto es el taekwondo tiene muchos beneficios para las niños y niñas, y es una excelente opción para elegir como actividad extraescolar.
Que el deporte es bueno para la salud es algo que sabemos de sobra, pero siempre es conveniente recordar qué beneficios físicos tiene la actividad que hemos elegido, sobre todo si se trata de nuestros hijos. El taekwondo, en concreto, fortalece el corazón, mejora la resistencia, aumenta la fuerza muscular y la flexibilidad, y entrena la coordinación y los reflejos.
Al practicar un deporte como el taekwondo el cerebro de los niños (como el de un adulto) segrega hormonas que mejoran el estado de ánimo, como la dopamina o la serotonina. Además de favorecer que estén de buen humor, tus hijos se sentirán con más energía cada día.
El taekwondo es un deporte de superación, y con la práctica notarán cómo van alcanzado nuevos objetivos de manera progresiva. Esto repercute positivamente en su autoestima y en la imagen que tienen de sí mismos, aportándoles una gran seguridad para desenvolverse en la vida.
Como te decíamos, es posible que te parezca un deporte agresivo, pero es una idea que hay que desterrar. De hecho, tiene el efecto contrario, ya que se ejercita de manera controlada, permitiendo que el niño pueda liberar el estrés o las tensiones que tenga acumulados y regular correctamente sus emociones.
Sabemos lo importante que es tener una buena concentración para poder afrontar los estudios, pero también cualquier actividad de tipo personal. El taekwondo ayuda al niño a que se concentre mejor en cualquier aspecto de la vida, reforzando la confianza en sí mismo y su capacidad para afrontar cualquier reto que se le presente.
Para hacer taekwondo es imprescindible el respeto, el compañerismo, la lealtad y la empatía. Son valores fundamentales de este deporte, por lo que tu hijo los aprenderá desde su primera clase, algo que le ayudará a ser cada día mejor persona.
No hay deporte que no se practique acompañado de una disciplina que es fundamental aprender desde pequeños. Un niño que es capaz de desarrollar la disciplina, será capaz de autogestionarse de manera eficaz, sin apenas esfuerzo, aprendiendo a manejar su vida con mayor autonomía.