Complemento de maternidad: ¿por qué ahora los padres pueden pedirlo?
El complemento de maternidad se aprobó en 2016 para reducir la brecha de género
Pero dejaba fuera a padres en la misma situación que la mayoría de mujeres
Ahora una sentencia del Tribunal Supremo les concede una indemnización
El complemento de maternidad fue creado para reducir la brecha de género que parte de una realidad incuestionable, y es que las mujeres son las más perjudicadas en su carrera laboral tras ser madres. Pero existe una realidad que va de la mano y es que también hay padres que, por diferentes motivos, han asumido la crianza de sus hijos. Tras una sentencia del Tribunal Supremo dictada el 15 de noviembre de 2023, los padres también pueden pedir el complemento por maternidad. Es más, quienes lo solicitaron con anterioridad a la sentencia y no se les concedió, tienen derecho a cobrar los atrasos.
¿Qué es el complemento por maternidad?
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Es un cuantía económica que desde 2016 reciben las mujeres que hayan tenido uno o más hijos. Se trata de un complemento que se añade a las pensiones de jubilación, viudedad o incapacidad permanente. La cuantía aumenta por número de hijos hasta un máximo de cuatro. El beneficiario también puede ser el padre cuando acredite que el nacimiento de un hijo (o varios) está vinculado a un perjuicio de su carrera profesional.
Este complemento se actualiza desde su aprobación con la revalorización de las pensiones. Eso sí, en el caso de jubilación parcial no está contemplado que pueda recibirse. Si los progenitores son dos mujeres o dos hombres, se asigna al que perciba pensiones públicas cuya suma sea de menor cuantía.
¿Qué pueden reclamar los padres que no recibieron este complemento?
Tras aprobar el complemento por maternidad en 2016, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) decidió en 2019 que se trataba de una ayuda discriminatoria. Después el Tribunal Supremo consideró que, al no haberse cambiado la ley, se estaba vulnerado un derecho fundamental de los progenitores. Por último, el Supremo determinó una sentencia que fija en 1.800 euros la cuantía que deben recibir los padres que no recibieron el complemento de maternidad como indemnización por los daños causados.