Violeta Mangriñán desvela a lo que ha "renunciado" por ser madre: "Que no os engañen, no es fácil"

El pasado mes de febrero, Violeta Mangriñán daba a luz a Gia, su segunda hija en común con Fabio Colloricchio. Solo un año después del nacimiento de su primogénita, Gala, la pareja anunciaba la llegada de su segundo bebé. Una niña muy querida por ambos, aunque entonces no estaba entre los planes de la creadora de contenidos quedarse embarazada de nuevo. A todo ello, también se le sumaba las tres mudanzas de los jóvenes en tiempo récord que, aunque en un principio se decidían a vivir en Valencia -la tierra natal de la empresaria-, finalmente volvían a la capital española, en donde estaba la mayor parte del trabajo de ambos.

Si por algo se caracteriza la influencer es por su naturalidad. Desde que se diera a conocer por primera vez en el programa de 'Mujeres, Hombres y Viceversa', siempre se ha definido como una persona que no tiene filtros a la hora de hablar y, en sus redes sociales, es una de sus máximas. Ahora, a través de su cuenta de Instagram -en donde ya alcanza el millón de seguidores-, la joven ha hecho una reflexión sobre lo duro que puede ser la conciliar maternidad y trabajo. ¡Te contamos todos los detalles!

"Ser madre y querer cumplir tus sueños profesionales es bien jodido, el sentimiento de culpa cada vez que tienes que separarte de tus hijos o hijas por trabajo es una mierda", ha comenzado diciendo Mangriñán a través de las historias temporales.

La joven, ha desvelado que lleva "meses casi" sin separarse de sus hijas, por lo que ha querido lanzar una reflexión sobre lo difícil que es para ella separarse de las menores por motivos de trabajo: "Me fui con Fabio cinco días a Formentera este pasado julio y desde entonces, no me he separado un solo día de ellas. Hay madres que no se separan en años, lo sé, pero yo suelo viajar por trabajo con bastante frecuencia, aunque bastante menos desde que soy mamá. Renuncio a muchos eventos y campañas que requieren de viajes si son largos".

Aunque ha mencionado que está "feliz y agradecida por todo lo que viene" en su vida, "el sentimiento de culpa" no la deja "disfrutar al cien por cien": "Tengo muy claro la madre y la mujer que soy, hago todo lo mejor que puedo siempre, sé que con mi trabajo a ellas les doy un futuro mejor y también quiero que ellas sean trabajadoras e independientes en un futuro. La teoría la tengo clarísima, pero...".

Finalmente, ha reiterado que, aunque es una experiencia maravillosa la maternidad, no todo es color de rosas: "Si quieres ser mamá, trabajadora y tienes sueños por cumplir, hazlo, pero no te engañes y que no te engañen. No es fácil".