Aurah Ruiz tenía 27 años cuando se quedó embarazada de su primer hijo en común con Jesé Rodríguez. A pesar de que llevaban poco tiempo juntos y se consideraba muy joven para estrenarse en la maternidad, aquella noticia supuso "una sorpresa muy bonita" en sus vidas. A pesar de vivir un buen embarazo y de tener acceso a los mejores médicos y pruebas con las que parecía que todo iba bien, cuando el bebé nació "sufrió una parada cardiaca" y tuvieron que quitarle de los brazos de su madre porque "se estaba muriendo". Así, entre lágrimas, lo ha recordado la extronista en 'Madres: desde el corazón', un programa de Mitele PLUS que presenta la abogada Cruz Sánchez de Lara.

"Cuando me le pusieron encima tenía un color muy extraño, estaba azul. No entendía que estuviese así. Yo no sabía lo que estaba pasando en ese momento, pensé que era normal. Entro en una parada cardiopulmonar y tuvieron que reanimarlo rápidamente. La siguiente imagen, cuando pude pasar a verlo, estaba en a incubadora con los ojos vendados y lleno de cables entero. No le vi la cara, respiraba una máquina por él porque él no podía respirar solo", ha contado la también influencer sobre cómo fueron esos primeros días de vida.

Nyan se quedó ingresado varias semanas en ese primer centro hasta que pudieron desplazarle al hospital general de Las Palmas de Gran Canaria y hacerle las pruebas necesarias para saber cuál era el diagnóstico. Con la intención de darle a su hijo "una calidad de vida", la pareja se puso en contacto con un hospital cercano a Manchester en el que parecían saber cuál era su situación. Sin embargo, tras pedir voluntariamente el alta del menor y pagar un vuelo medicalizado para desplazarle, todo salió mal.

"Nos empeñamos en trasladarlo, estaba estable pero delicado. Nos prometieron que se iba a realizar esa operación y dos días después no iríamos a casa y, cuando llegamos, todo lo que habíamos organizado se destruyó. No tenían ni idea de lo que le pasaba, el niño se desestabilizó", recuerda Aurah sin poder contener las lágrimas.

Por la privacidad del menor, la influencer no ha querido desvelar cuál es el diagnóstico. Lo que sí ha explicado es que se trata de una enfermedad "rara, congénita y heredada" por su parte y por la de su padre. "Los dos tenemos el mismo gen mutado y el niño lo ha heredado. Es mala casualidad. No tiene cura, es una enfermedad que pocas personas en el mundo la tienen", comentaba.

Aunque al principio estuvieron "muy unidos", seis meses después del nacimiento del bebé se torció su relación sentimental. Aurah cuenta que tuvo que trasladarse a la península porque le recomendaron que su hijo estuviese ingresado en el Hospital La Paz, en Madrid, y fue cuando "varias operaciones salieron mal" y ella comenzó a "volverse loca". "Paso un año casi hasta que salimos del hospital. Cada 5 minutos vomitaba día y noche, había que alimentar a un niño cada media hora. No podía dormir, tenía que estar despierta 24 horas y estaba sola. Si no lo recuperaba cada 5 minutos se moría. Si no duermes te vuelves loca", recuerda.

En esos meses rompieron su relación y Aurah se fue a casa de sus padres, a Gran Canaria, porque no tenía "nada". Antes de comenzar su relación con Jesé vivía de alquiler con una amiga en Madrid, después se mudó a la casa de él y cuando su relación terminó él volvió a Reino Unido por trabajo. "Yo había dejado mi vida de lado para vivir la de él. Tenía dinero ahorrado, pero me gasté todo lo que tenía estando con él y en el embarazo entonces no tenía nada (...) Yo siempre he estado con él por amor, no sé cómo he soportado tanto", asegura.

Fue entonces cuando, al ver que Jesé no se hacía cargo económicamente del menor y de los costes que implicaba su enfermedad, el padre de Aurah le recomendó ir a un abogado. La situación entre ellos pasó a ser una guerra judicial porque el futbolista no le cogía el teléfono y no atendía sus peticiones. La influencer decidió participar en 'Gran Hermano' y otros realities para ganar dinero y poder mantener a su hijo.

Finalmente, tiempo después, Jesé volvió y recuperó su relación pidiéndole matrimonio y dándose el 'sí, quiero' en un resort de lujo en Maspalomas. Actualmente, según ella misma ha contado, son "muy felices". "Él es más joven que yo. Las personas se equivocan y él reconoció su error y está para su hijo y para mí. Fue de cuento de hadas, de película de amor", terminaba diciendo en esta emotiva charla.

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