Pasaron varios días entre que Adriana salió de cuentas y Luna llegó al mundo. El 18 de julio, después de 24 horas de ausencia en redes, llegó el notición. "¡Qué ilusión nos hace contaros que ayer, 17 de julio a las 17:45 horas, nuestra hija llegó para llenarnos de felicidad con sus 2,850 kilitos!", escribió la presentadora junto a una foto del piel con piel aún en el hospital.
Un día después, Adriana Abenia abandonó la clínica Monte Príncipe acompañada por su chico, Sergio Abad, que compartió con el mundo su "felicidad absoluta por la llegada de Luna, por la sonrisa permanente de Adriana durante todo el parto y por el inolvidable momento".
Una vez en casa, fue ella la que volvió a mostrar a la pequeña, siempre tapando su rostro a la espera de un momento como el de hoy.
Adriana Abenia siempre ha tratado con normalidad lo bueno y lo malo de la maternidad. Hace unos días, la reportera posó de cuerpo entero para denunciar la presión por estar perfectas tras el parto. "Han pasado 12 días desde que Luna aterrizó en nuestras vidas y, aunque ya he recuperado mi peso, tengo todavía inflamada la barriguita y no deseo ocultarla ni ir por la vida de súper mamá. Estoy orgullosa y muy feliz de haber dado cobijo allí dentro a mini Abenia y no entiendo esa absurda manía de presionarnos a las mujeres para que parezcamos perfectas nada más dar a luz. Así que aquí va esta foto, para que veamos que lo imperfecto también puede ser maravilloso", escribió a modo de declaración de intenciones.
Nos lo prometió días antes de dar a luz: a pesar de que ya habíamos visto al bebé, pronto veríamos su carita en condiciones. Y por fin llegó el momento. "No puedo obviar una parte tan importante de mi vida", advirtió en su momento. Entre sus planes de futuro, Adriana Abenia tiene pensado volver a la tele en septiembre y no bautizar a Luna. "Solo deseo que tenga fe en sí misma", explicó vía stories.