Bebés 'pandemiales': consejos para proteger a tu hijo y evitar contagios

Los bebés que nacieron a partir de marzo lo hicieron en una realidad muy distinta a la que estábamos acostumbrados. Su llegada al mundo no fue nada fácil debido a la pandemia que estamos viviendo desde hace más de siete meses. Por eso, ahora, las visitas a los recién nacidos son más restringidas y el único deseo de los padres es poner cierta distancia para evitar el contagio. Las consecuencias del coronavirus todavía siguen siendo desconocidas y, por eso, muchos progenitores prefieren prevenir todo aquello que les puede acarrear graves consecuencias.

Estos pequeños son los denominados ‘bebés pandemiales’ y desde su nacimiento tendrán que seguir unas recomendaciones, algunas por imposición y otras por recomendación, para evitar los riesgos de contagio. A medida que hemos conocido un poco más sobre el virus, hemos sido conscientes del peligro al que estamos expuestos, por eso, ahora será importantísimo el distanciamiento social, lavarse las manos a conciencia y llevar siempre puesta una mascarilla.

Esto es algo que tendremos que hacer entender a familiares y amigos para respetar y proteger la salud de los bebés. En Divinity, te contamos qué se podrá hacer y qué no para evitar al máximo el riesgo de contagio.

Desde que el coronavirus se instalara en nuestras vidas muchas cosas han cambiado. Ahora, por ejemplo, cuando una mujer ingresa en un hospital para dar a luz, lo hace acompañada únicamente por su pareja o un familiar.

Además, debido a la situación en la que se encuentran los centros médicos en España lo más recomendable será pasar el mínimo tiempo posible. Por tanto, las visitas, una vez que el pequeño haya nacido, estarán totalmente descartadas. Algo que también es un alivio para muchos padres, que no saben cómo decir a un familiar o a un amigo que no acuda a verle en esos primeros días de hospital. Lo más recomendado es que los padres utilicen en todo momento la mascarilla. El único propósito es cuidar de la salud de los más pequeños.

Tenemos que tener muy en cuenta que los niños son transmisores del virus, por lo que habrá que tener especial cuidado con ellos. Por tanto, lo más recomendable es que, durante los primeros meses de vida, las únicas personas que tengan un contacto estrecho con el bebé sean sus familiares más cercanos.

También será adecuado que solamente le cojan en brazos sus padres. Además, habrá que evitar cualquier situación en la que pueda haber una acumulación de gente, y no solo por la salud del bebé sino también la de los padres. Lo que los expertos recomiendan es que no se organice ninguna celebración, como puede ser un bautizo, donde el reunir a una gran cantidad de personas puede poner en juego la salud de todos.

Otra opción que tendréis que valorar es si queréis que el pequeño acuda a una escuela infantil. Probablemente, antes de la pandemia, ya teníais clara la decisión, pero puede que la situación actual genere dudas. Es cierto que sacar a tu hijo de casa, como hemos comentado, puede entrañar distintos riesgos, pero también es verdad que será de vital importancia que los pequeños se relacionen con gente de su edad y, sobre todo, que aprendan. Además, todos los centros están perfectamente acondicionados para que los bebés y los niños acudan sin poner en peligro su salud. Aún así, debido a la situación que vivimos, muchos padres no ven como una opción lo de llevar a sus pequeños a un centro especializado y prefieren dejarlos en casa. Esta decisión, totalmente personal, dependerá de vuestra situación y vuestras preferencias.

Siempre que los bebés salgan a pasear los papás tendrán que llevar puesta la mascarilla, al igual que todo aquel que se les acerque. Que les dé el aire fresco será fundamental para su desarrollo, pero habrá que cumplir todas las medidas impuestas por el gobierno. Además, antes de coger al pequeño en brazos, será esencial lavarse bien las manos e higienizarse, para que sea más seguro. Por tanto, aunque seáis sus padres tendréis que seguir esa serie de recomendaciones, que harán que no peligre ni vuestra salud ni la de vuestros pequeños.