La vemos a diario por la pequeña pantalla y ni con esas nos dimos cuenta de esa “curva de la felicidad” que nos descubrió por primera vez hace un par de meses. Marta Flich espera su primer hijo con el escritor Edu Galán. La copresentadora de ‘Todo es mentira’, que suele ser muy discreta en todo lo que respecta a su vida privada, comunicó la feliz noticia vía Instagram. Misma red social que ha utilizado para compartir una sincera reflexión sobre las inseguridades y los miedos que la invadieron cuando supo que se estrenaría en la maternidad a finales de este año.

La periodista, que está en su séptimo mes de embarazo, ha confesado que su edad hizo que sus inquietudes aumentaran. “Cuando me enteré imaginé cómo iba a ser todo ese proceso. Tener 43 años –ahora ya 44- añadía incertidumbre a todo: ¿podré seguir trabajando con la misma intensidad? ¿Cómo afecta dedicarme a un trabajo tan expuesto y a veces, emocional? ¿Mi cuerpo estará preparado para los cambios?”, se hizo múltiples preguntas que ha ido respondiendo durante este tiempo.

La compañera de Risto Mejide en las sobremesas de Cuatro ha recordado que durante los dos primeros meses de gestación, que coincidieron “con un pico de trabajo importante”, tenía tanto sueño que temía quedarse dormida en los programas que emitían en directo por la noche. No obstante, más allá de la hipersomnia, no ha tenido más síntomas que le hayan impedido seguir adelante con su trabajo: “Nunca tuve dolores, molestias o malestar que me hicieran plantearme quedarme en casa. Si los hubiera tenido y controladísima por mi ginecólogo, hubiera parado”.

Afrontar la maternidad a los 44 años no es nada fuera de lo normal y la periodista lo afronta con total naturalidad, cuidándose físicamente como lo hacía antes de quedarse embarazada, aunque sus palabras denotan que echa de menos entrenar el gimnasio: "Hace tanto que no piso uno que parece que fue en otra vida. Me muevo y me cuido. Todo compatible con caprichos saludables".

Para finalizar, tras estas aclaraciones, la valenciana ha asegurado que todo va según lo previsto, desvelando el motivo por el que ha decidido compartir sus temores iniciales dos meses antes de dar la bienvenida a Berta –así se llamará su bebé-: "Como parece que a veces los miedos y las inseguridades se acomodan en nuestras vidas, de vez en cuando hay que verbalizar que en la normalidad está muchas veces la mayor felicidad”.