El vínculo entre la madre y el bebé que se crea durante el embarazo es tan fuerte que es muy normal que se noten ciertos movimientos dentro de la tripa. Por ejemplo, es normal que en un determinado punto de la gestación se empiecen a notar las patadas del bebé e incluso si este tiene hipo. Lo cierto es que este último punto suele desconcertar a las embarazadas, porque no entienden qué está pasando. Además, hay mucho desconocimiento acerca de este tema. Lo mejor es que escuches tu cuerpo y te informes. Así, tu ginecólogo te dará explicación a las cosas que te suceden, tanto a ti como a tu bebé, y será quien te dará más indicaciones y te guiará en el camino del embarazo.

Que el bebé tenga hipo, dentro del vientre materno, no debe preocuparnos. Es una situación que se da una infinidad de veces y forma parte del desarrollo normal del feto. Por eso, debe vivirse como algo normal, que no trae ninguna complicación. Eso sí, puede que dure unos minutos o que se extienda hasta media hora, dependerá del bebé. Lo que más te reconfortará saber es que para el bebé no será nada molesto y, es más, muchos especialistas lo vinculan a un signo de vitalidad. Por eso, te tendrás que mantener tranquila, ya que el hipo no parará hasta que el cuerpo del bebé lo decida.

Pero, ¿por qué se produce el hipo? Durante el embarazo, los órganos del bebé todavía no están maduros. Es por eso que su diafragma se contrae en ciertas ocasiones y se produce el llamado hipo fetal. En definitiva, se trata de un espasmo. El diafragma es el músculo que se encarga de asistir la respiración, a través de la distensión y de la contracción. Además, separa la cavidad torácica de la abdominal. A través del hipo, el diafragma comienza a ejercitarse y es una forma de preparación para que el bebé pueda respirar, luego, fuera del útero materno. Porque, aunque los pulmones del bebé no funcionen hasta su nacimiento, estos ingresan líquido amniótico. Este líquido, al entrar y salir de los pulmones, genera contracciones -como es el hipo- en el diafragma.

Estas contracciones son, concretamente, las que preparan los pulmones del bebé para que funcionen correctamente una vez que se tengan que enfrentar al mundo exterior. Este hipo se percibe más claramente durante el tercer trimestre de embarazo, aunque se desconoce a cien cierta si también puede darte durante los primeros meses de gestación. A nivel de percepción, lo que caracteriza al hipo fetal es que la madre siente unos golpecitos, de forma constante y rítmicos. Así, podrá diferenciarlos de las patadas del bebé o de otros movimientos que se producen en el útero materno.

Como ya hemos comentado, este hipo cumple una función muy importante para su desarrollo. Según los especialistas, el hipo servirá para preparar al bebé para que, una vez fuera, pueda respirar por sí solo. El diafragma es el músculo que asiste la respiración, por lo que le prepara para el momento del nacimiento. Además, se vincula con el desarrollo del sistema nervioso del feto. También, se relaciona con la ejercitación de habilidades motoras; sobre todo, aquellas relacionadas con tragar y succionar. La succión cobrará verdadera importancia una vez que el bebé ha nacido, ya que evita que la leche ingrese en los pulmones. Del mismo modo, las contracciones que genera el diafragma ayudarán a regular la frecuencia cardiaca del bebé.

Si bien es cierto que algunos malestares habituales durante el embarazo pueden prevenirse o aliviarse, en el caso del hipo fetal no es así. La madre, al percibir el hipo, no puede hacer nada al respecto. Además, como ya hemos comentado, no se trata de una situación que ponga al bebé en riesgo, es totalmente normal. Muchos bebés continúan teniendo hipo una vez fuera del útero, después del nacer. Eso se debe a que su sistema respiratorio todavía se tiene que acostumbrar a vivir en el exterior.

Por tanto, el hipo será un proceso que no se conoce con profundidad y que puede resultar extraño e incluso molesto en un principio. Sin embargo, en condiciones normales no debería preocupar a la madre, así como tampoco sería necesario recurrir a un médico. En cualquier caso, en situaciones donde el hipo sea constante durante unos días, será recomendable acudir a un especialista. De esta manera podrás resolver tus dudas y quedarte más tranquila. Todas estas percepciones lo que hacen es profundizar el vínculo de la madre con el bebé. Por eso, es muy recomendable conocer qué le sucede mes a mes a tu bebé, cómo es su evolución y, así, poder disfrutar plenamente del embarazo.