La insuficiencia ovárica primaria o prematura se da cuando los ovarios de una mujer dejan de funcionar cómo lo hacían normalmente y, dentro de este problema, se encuadrarán aquellas mujeres menores de 40 años. Cabe destacar que, a partir de dicha edad, las mujeres suelen ser menos fértiles y pueden comenzar a tener distintos periodos menstruales irregulares a medida que empiezan con la menopausia. En las mujeres con insuficiencia ovárica primaria, esos periodos irregulares y esa fertilidad reducida suelen comenzar antes de los 40.
Eso sí, hay ocasiones en las que puede empezar hasta en la adolescencia. Es por eso que será muy importante acudir a un especialista, como el ginecólogo, para que nos realicen revisiones periódicas. Hay que tener en cuenta también que la insuficiencia ovárica primaria será muy diferente a la menopausia prematura. En la menopausia prematura, los periodos suelen detenerse antes de los 40 años y la mujer ya no se podrá quedar embarazada.
La causa podrá ser variada e incluye una causa natural o una enfermedad, así como una cirugía, quimioterapia o radiación. En la insuficiencia ovárica primaria, algunas mujeres pueden tener periodos y, también, pueden quedarse embarazada. Aún así, en la mayoría de casos, la causa podrá ser totalmente desconocida. Esto sucede en el 90 por ciento de los casos. Además, las distintas investigaciones han mostrado que este fallo está relacionado con problemas en los folículos, que son unos pequeños sacos en los ovarios.
Estos folículos pueden presentar distintos problemas como enfermedades genéticas, como el síndrome de X frágil y el síndrome de Turner. También, puede haber un bajo número de folículos, enfermedades autoinmunes o presentar problemas por haberse sometido a quimioterapia, trastornos metabólicos y toxinas, como el humo de fumar, productos químicos y pesticidas. Sí que es cierto que nos podremos encontrar con distintos factores que pueden aumentar el riesgo de una mujer de tener insuficiencia ovárica primaria.
Sí que es cierto que nos podremos encontrar con distintos factores que pueden aumentar el riesgo de una mujer de tener insuficiencia ovárica primaria. Es el caso de aquellas mujeres que tienen una madre o hermana con insuficiencia ovárica primaria, algunos cambios en los genes y, también, ciertas enfermedades como aquellas autoinmunes o las infecciones virales. También, será el caso de tratamientos contra el cáncer, como la quimioterapia y la radioterapia, así como la edad, en mujeres jóvenes, aunque eso sí, se volverá más común entre los 35 y los 40 años. Pero, ¿cuáles son los principales síntomas de esta insuficiencia ovárica?
El primer signo que suele manifestarse son los periodos irregulares o la ausencia de ellos. Además, los signos posteriores pueden ser similares a los de una menopausia natural, como pueden ser los sofocos, los sudores nocturnos, la irritabilidad, la falta de concentración, la disminución del deseo sexual, el dolor durante las relaciones sexuales y la sequedad vaginal. Estas suelen ser las razones por las que las mujeres suelen acudir a su especialista.
Esta insuficiencia ovárica puede conllevar otros problemas, como la ansiedad y la depresión. Se puede producir el síndrome del ojo seco y una enfermedad de la superficie ocular, que pueden causar incomodidad y visión borrosa. Además, si no se tratan pueden causar un daño permanente en los ojos. Esta insuficiencia aumentará el riesgo de ateroesclerosis y de infertilidad, así como de hipotiroidismo. También, podrá darse osteoporosis, ya que la mujer, al no tener el suficiente estrógeno, puede desarrollar osteoporosis, una enfermedad ósea que causa huesos débiles y frágiles.
Para diagnosticar la insuficiencia ovárica, el especialista considerará la historia clínica de la mujer, una prueba de embarazo, un examen físico y, también, un análisis de sangre. Este último servirá para verificar los niveles de algunas hormonas. Además, también se realizará una prueba de sangre para realizar un análisis cromosómico. También, se podrá sugerir una ecografía pélvica para ver si los ovarios están agrandados o tiene varios folículos. Sí que es cierto que actualmente no existe ningún tratamiento comprobado para restablecer el funcionamiento normal de los ovarios de la mujer. Sí que habrá tratamiento para alguno de los síntomas de la insuficiencia ovárica primaria.
Así, el especialista podrá recomendar una terapia de reemplazo hormonal, suplementos de calcio y vitamina D, fertilización in vitro, una actividad física regular y un peso corporal saludable y hasta tratamientos para enfermedades relacionadas, que podrán incluir medicamentos y hormonas. Aún así, lo más importante será siempre acudir a un especialista.