Las apariciones de Kourney Kardashian con su hija Penélope Disick, no por habituales, son menos esperadas. Primero fue kim Kardashian, pero la fama se ha extendido a todo el clan Kardashian y cualquier cosa que hacen se convierte en noticia, incluso un simple paseo. Ambas forman una nueva pareja de madre e hija 'fashionistas' que crean tendencia con sus estilismos. Y además, desde que dio a luz, se ha destacado la naturalidad con la que trata la hermana de Kim a su retoño delante de los medios (que llegó a su tope cuando Kourtney se lanzó a darle el pecho a Penélope en una piscina pública y las cámaras lo captaron).
Ya os contamos en otra ocasión que desde que su hermana Kim Kardashian dio a luz a North West y se retiró (esperemos que temporalmente) de la vida pública, son Kourtney y su hija Penelópe las que han ganado protagonismo mediático. Hasta aquí todo perfecto, pero sospechamos por la expresión de la cara de la pequeña Penélope y por el tamaño del turbante, que la niña no va muy contenta con el complemento capilar de hoy. ¿A que no?