Tan solo habían pasado unas horas desde que había dado a luz a su hijo Miguel cuando Paula Echevarría utilizó el altavoz que da Instagram para reivindicar la lactancia materna. A través de una foto en la que daba el pecho al recién nacido, ese que desde el 11 de abril es su "compañero de viaje", la actriz hizo de su feed un álbum diario de cómo es su nueva vida con su bebé. Dar el pecho "a demanda", la opción de alimentación por la que se decantó, sin horarios ni tiempo de duración de las tomas, le ha generado una dependencia de la que está empezando a sufrir la cara B. Un "bonito remolino" emocional que técnicamente se conoce como crisis de lactancia. Pero, ¿en qué consiste exactamente? ¿cuáles son los principales síntomas? ¿cómo se puede superar?

Durante sus primeros seis meses de crecimiento, es habitual que se den este tipo de crisis según van aumentando las tomas. Hasta doce al día, pueden llegar a demandar. Esto da pie a que la madre, en este caso Paula, se preocupe por la excesiva necesidad de su hijo de estar alimentado, llegando a crear inseguridades y a pensar que no está generando la leche que su hijo demanda. Lloros, sensación de hambre continua, reblandecimiento del pecho de la madre... Estos son los síntomas clave para identificar que tu bebé está sufriendo una crisis de lactancia. Pero es algo transitorio.

Miguel Torres Echevarría estaría pasando la primera. Suele producirse a partir de los primeros quince días de vida. La siguiente se produce en torno a los tres meses. Y la última, a los seis. Cada fase, que suele alargarse unas tres semanas, va directamente relacionada con el proceso de crecimiento del pequeño. Al mismo tiempo que el bebé crece, también lo hacen sus ansias de comer. Algo que debe ser correspondido, no teniendo miedo a que el recién nacido mame lo que reclama.

Esto, en la práctica, tiene sus contras, especialmente para la madre, que como bien dijo Paula hace unos días en su Instagram te hace "no tener vida". "¿Alguien más pasando por esto o que lo haya pasado que me dé consejos para poder vivir además de alimentar/calmar/crear vínculo con mi bebé?", preguntó en alto. Los expertos recomiendan que en estos casos, a veces desesperantes, la madre recurra a su pareja o familia para quitarse de responsabilidades domésticas y poder dedicar su energía a la lactancia (y al descanso posterior, siempre que el bebé lo permita).

"El consejo es que todo lo demás puede parar y que eso es lo realmente importante, y demasiado efímero para mi gusto", le ha recomendado su compañera de profesión, la actriz Sara Sálamo, que acaba de criar a dos bebés. "En un abrir y cerrar de ojos formará parte del pasado, así que lo mejor que te puede pasar es que tu cachorro vaya contigo a todos lados", le ha recordado.

Carola Baleztena, que tuvo a su primer hijo con Emiliano Suárez casi a la vez que Paula Echevarría, se hermanó con ella visibilizando su incomodidad por estar todo el día "con la pechuga fuera, sin vida y quién sabe hasta cuándo". Pero tranquilidad, los médicos especialistas siempre manifiestan lo breve que es este periodo de crisis de lactancia.

Es más, en ocasiones, si la situación pasa a ser límite y es complicada de soportar a nivel emocional, animan a las madres a que se apunten a grupos de lactancia para sentirse apoyadas por otras mujeres en su misma situación. En su caso, en el de la actriz, este abrazo colectivo lo está recibiendo de forma virtual a través de Instagram, donde son miles las seguidoras que le han explicado que "esto pasará".