Apendicitis en niños: síntomas fundamentales para poder detectarlo y actuar rápidamente
La apendicitis será una complicación común entre los niños.
Por eso, será muy importante saber identificar todos los síntomas, ya que podrá tener consecuencias graves.
Entre ellos, podemos encontrarnos con un dolor fortísimo de abdomen que se extiende por la zona bajo del vientre.
La apendicitis será una dolencia que se puede dar con frecuencia en niños. El apéndice es un órgano de tamaño reducido que está conectado al intestino grueso en la parte inferior derecha del vientre. Así, cuando se infecta, es cuando se produce la ‘apendicitis’, que se tratará de una urgencia médica, por ello será muy importante conocer los síntomas para saber detectarla y que no pueda derivar en consecuencias más graves como una peritonitis.
Los síntomas de la apendicitis
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Los padres tendrán que observar dónde se producen los dolores de su pequeño. Los primeros signos de esta complicación suele ser la fiebre baja y mucho dolor alrededor del ombligo. También, puede parecer un simple dolor de estómago, por eso habrá que estar muy pendiente de la evolución. En la mayoría de ocasiones, este dolor lo que hará será evolucionar y volverse más intenso. Además, se desplazará hacia la parte inferior derecha del vientre.
Por eso, habrá que estar pendiente si siente un fuerte dolor, sobre todo alrededor del ombligo o en la parte inferior derecha del vientre. Es posible que, al principio, el dolor sea más intermitente y luego se vuelva más constante e intenso. También, habrá que incluir entre estos síntomas la fiebre baja, la pérdida de apetito, náuseas, vómitos, diarrea, así como vientre hinchado y distendido. Si el dolor se extiende por todo el vientre, esto podrá significar que el apéndice se haya explotado y se denominará ‘apendicitis perforada’. Esta será una situación más grave.
Esto conllevará fiebre alta y acudir al hospital de urgencia. En el caso de que no se extraiga el apéndice perforado, este tendrá potencial de explotar al cabo de 48 y 72 horas, lo que hará que las bacterias se extiendan por todo el cuerpo. La infección puede dar lugar a una gran acumulación de pus o bien diseminarse por toda la zona abdominal. Además, la apendicitis podrá darse, con más facilidad, en aquellas edades comprendidas entre los cinco y los veinte años. Eso sí, será muy poco frecuente entre los lactantes.
Cuáles pueden ser sus consecuencias
Cuando se obstruye el apéndice, sí que es cierto que pueden crecer una infinidad de bacterias en su interior y causar una infección. Sí que es cierto que habrá otras causas que podrán provocar la obstrucción del apéndice, como es el caso de las heces duras, ganglios linfáticos inflamados y parásitos y otras enfermedades. Además, la apendicitis no será una enfermedad contagiosa.
¿Cómo se diagnostica el apendicitis?
Los síntomas pueden ser muy parecidos a los de otros problemas médicos, como pueden ser los cálculos renales, la neumonía o las infecciones de orina. Por eso, realizar un buen diagnóstico será considerablemente complicado.
Para confirmar o descartar una apendicitis, el médico explorará el abdomen del niño para detectar signos de dolor o áreas dolorosas en la palpación. El médico también podrá pedir un análisis de sangre o de orina. A algunos niños también se les realizará una ecografía en el abdomen y en el pecho o una ecografía o tomografía axial computada en la zona abdominal.
Para tratarla, el especialista realizará una operación para extraer el apéndice infectado. Esta operación se denomina apendicetomía y, en la mayoría de ocasiones, los cirujanos usarán un pequeño dispositivo para extraer el apéndice a través de un pequeño corte hecho en el vientre del paciente. Los niños que se someten a la apendicectomía suelen permanecer hasta un día en el hospital. Antes y después de la intervención será posible que el equipo médico le proporcione al pequeño líquidos y antibióticos por vía intravenosa.
La importancia de frenar la infección
Esto ayudará a prevenir posibles complicaciones, como puede ser una infección. También, calmará los dolores. En el caso de que se haya explotado el apéndice, el niño podrá permanecer más tiempo en el centro médico, ya que se tendrá que proporcionar antibióticos para matar a todas las bacterias. Eso sí, no habrá ninguna forma de prevenir la apendicitis. Eso sí, cuando los padres detectan los síntomas más comunes y los pequeños son llevados al hospital será cuando acudan al hospital. Será allí donde recibirá la atención médica más recomendada y detectarán y tratarán sin ningún problema.